“Se sobrelleva (la presunta violación), pero no se olvida”
El juicio contra José Enrique Abuín por el crimen de Diana Quer deberá determinar si, como sostienen la Fiscalía y la acusación, la joven fue raptada con la única intención de agredirla sexualmente. Estos días en Santiago de Compostela se juzgan exclusivamente estos hechos, y así lo ha recordado insistentemente el magistrado presidente del tribunal, Ángel
Pantín. Pero han sido inevitables las referencias a la denuncia por violación que Vanesa, la hermana gemela de Rosario, la exmujer del Chicle, presentó contra su cuñado cuando ella sólo tenía 17 años. Vanesa declaró ayer. Su caso se archivó en el 2006 y se ha reabierto en un juzgado de Noia en el contexto del crimen de Diana Quer. Trece años después, la mujer explicó cómo todos en su familia, salvo su gemela, mujer ya entonces de Abuín, la creyeron. Pero aun así, con el paso de los años, fue coincidiendo con su cuñado en casa de sus padres y por su hermana y por su sobrina rehízo la relación y llegó a compartir con él alguna caña en terrazas o comidas, pero evitó siempre quedarse a solas con él. “Se va sobrellevando, pero no se olvida, se queda para siempre en la cabeza”, dijo. El tiempo también sirvió a la otra hermana, Elena, que incluso permitió que el acusado fuera padrino de su hijo hace seis años. “Aquello de mi hermana pasó hace muchos años”, se justificó ayer. La exmujer de Abuín dijo que se habían divorciado tras la detención, pero que hacía años que el amor había terminado.