La Fiscalía pide imputar a Francisco González por el caso Villarejo
Atribuye delitos de cohecho y revelación de secretos al expresidente del BBVA
La Fiscalía Anticorrupción ha solicitado a la Audiencia Nacional la imputación del expresidente del BBVA Francisco González y otros directivos del banco por los contratos que suscribió la entidad con el comisario jubilado José Manuel Villarejo.
Según explicaron fuentes jurídicas, la Fiscalía ha dirigido un escrito al juez instructor del conocido como caso Villarejo, Manuel García Castellón, para que cite a declarar a González en calidad de investigado por los presuntos delitos de cohecho y revelación de secretos.
González emitió un breve comunicado en el que ha reafirmado su “plena disposición a colaborar con la justicia”, tal y como señaló el pasado mes de julio tras conocerse la imputación de BBVA como persona jurídica.
El ministerio público ha pedido también la imputación de Juan Asúa, asesor de cabecera del actual presidente de la entidad financiera, Carlos Torres, quien en diciembre del 2018 le nombró consejero de presidencia. En los años investigados, Asúa fue responsable del BBVA en España y Portugal y posteriormente del área de inversión corporativa.
Asimismo, Anticorrupción ha pedido que se cite como investigado al anterior responsable de regulación y control interno del BBVA, Eduardo Arbizu, cesado en julio, tras conocerse la imputación del banco como persona jurídica. La Fiscalía pide también que se cite al banco como persona jurídica, tras suspenderse varias veces su comparecencia, lo que podría realizarse la semana que viene. El banco ha anunciado también su disposición a colaborar con la justicia, ante la que ya ha presentado un informe ‘forensic’ encargado expresamente para conocer el pormenor de las relaciones con las sociedades de Villarejo.
La fiscalía ha pedido que se cite también en relación con la causa a una decena de altos cargos del banco, como participantes en distinto grado en los contratos objeto de las pesquisas. Entre ellos están el anterior consejero delegado de la entidad, Ángel Cano, y el anterior jefe de seguridad, Julio Corrochano, considerado el interlocutor de Villarejo y para quien el juez impuso una fianza de 300.000 euros.
Según las investigaciones, durante 13 años el banco realizó encargos al ex comisario por importe superior a los 10 millones de euros, que iban desde supuestas tareas de espionaje para frustrar la entrada en el banco de la constructora Sacyr, hasta frenar la presunta extorsión de una asociación de consumidores pasando por analizar la situación de morosos como Martinsa o Prasa.
La investigación que ha llevado a la imputación de González se sigue en la novena pieza separada de esta macrocausa que ya tiene 18 líneas distintas de investigación y que se prevé superará la veintena antes de que acabe el año, dada la multitud de “proyectos” y clientes que tenía el “clan parapolicial” que dirigía Villarejo y de los que dejó constancia en más de 40 terabytes de información que se le intervinieron cuando fue detenido, en noviembre de 2017.
González cedió la presidencia del banco el 31 de diciembre de 2018 a Carlos Torres Vila y renunció a cualquier posición ejecutiva y consejos de administración del grupo. Únicamente mantenía la presidencia de honor del banco y de la Fundación BBVA, ambos sin ningún tipo de retribución económica. Posteriormente, la víspera de la celebración de la junta general de accionistas del grupo, el pasado 14 de marzo, decidió abandonar “temporalmente” los cargos en la Fundación y en el banco a la espera de que concluyeran las investigaciones sobre el ‘caso Villarejo’ “para evitar que se utilice su persona para dañar a la entidad”.
El juez investiga 13 años de contratos con el expolicía, por valor de 10 millones de euros