El juez belga unifica la causa de Comín y Puig con la de Puigdemont
La audiencia por las euroórdenes se celebrará el 16 de diciembre en Bruselas
El destino judicial belga del expresident Carles Puigdemont y de dos de sus antiguos consellers, Toni Comín y Lluís Puig, vuelve a estar unido. A petición de las defensas, un juez belga aceptó unificar las dos euroórdenes que, por motivos desconocidos, el juez Pablo Llarena, envió a Bélgica por separado y con tres semanas de diferencia. La audiencia donde se decidirá la posible extradición de los tres reclamados por la justicia española se celebrará el 16 de diciembre, fecha en que ya estaba programada la de Puigdemont.
La defensa de Comín y Puig pidió el aplazamiento para disponer de tiempo para estudiar la documentación y también por su interés en ejercer una defensa conjunta de los tres reclamados. Su suerte la decidirá el juez Jan Coppens, del tribunal de primera instancia de Bruselas, sección neerlandófona, y que fue también quién se encargó de juzgar las dos euroórdenes anteriores planteadas por el Tribunal Supremo.
Durante este período hasta el 16 de diciembre, las partes tienen marcados unos plazos para hacer llegar sus alegaciones al juzgado, y una vez celebrada la vista, el juez suele emitir veredicto en un plazo aproximado de siete días, aunque hay recursos posibles para plantear ante el tribunal de apelación y el de casación.
La estrategia de defensa de Puigdemont y sus dos exconsellers se basará en dos grandes principios. El primero será jugar la carta de la potencial inmunidad de Puigdemont y Comín como eurodiputados electos. Aunque no se les ha reconocido este status hasta el momento, tienen pendiente un recurso ante el Tribunal de Justicia de la UE, sin olvidar que, probablemente, antes el mismo tribunal se pronunciará sobre un caso muy similar, el de Oriol Junqueras. Por otro lado, el segundo eje de la defensa será mantener que en España, no tendrán un juicio justo por la falta de respeto a la separación de poderes. “Cuando el presidente del gobierno dice lo que dice de la Fiscalía, la vicepresidenta le secunda, el ministro de exteriores defiende estas declaraciones… están faltando al respeto a la separación de poderes”, dijo Toni Comín, que también se refirió a un artículo publicado esta semana en la prensa belga por la vicepresidenta Carmen Calvo, en qué pedía a Bélgica que respetara las decisiones de la justicia española. Respecto a la potencial inmunidad de Puigdemont y Comín, hasta el momento la justicia belga no se la ha reconocido, pero en la vista del 16 de diciembre, los dos plantearan al juez de Bruselas que consulte al Tribunal de Justicia de la UE sobre el caso. Le recordarán también que tienen introducido un recurso ante ese mismo tribunal europeo reclamando esta inmunidad y plantearán, como alternativa, que el juez belga espere a la resolución de esta causa antes de pronunciarse. El caso se abrió en julio a raíz de la solicitud de Puigdemont y Comín de que se aplicaran medidas cautelares para que pudieran asistir a la sesión constitutiva del Parlamento Europeo el 2 de julio. Las cautelares fueron rechazadas, pero el tribunal aún no se ha pronunciado sobre el recurso que interpusieron.
“Tenemos que ir paso a paso y estaremos preparados para todo”, declaró el abogado Simon Bekaert, sin querer entrar en los detalles de su estrategia. Pero, es evidente que en su caso también puede tener una influencia indirecta la posición del Tribunal de la UE sobre la inmunidad de Junqueras. La opinión del abogado general, conocida este martes, consideró que hubiera tenido que acceder al acta de eurodiputado, pero es una opinión no vinculante, por lo que habrá que esperar a la sentencia. La causa no es la misma, pero puede ser utilizada como un argumento adicional en las tesis de la defensa.
La inmunidad sólo la pueden alegar Puigdemont y Comín, los únicos diputados electos. Las peticiones de extradición también varían, En el caso de Puigdemont y Comín se solicitan por los delitos de sedición y malversación, y en el de Puig, sólo por malversación.
Las defensas pidieron el aplazamiento para estudiar el caso y plantear una estrategia común con Puigdemont