Barcelona quiere blindar su veto a los pisos turísticos
El Consistorio asegura que amplía la prohibición ante posibles cambios normativos de la Generalitat
La comisión de gobierno del Ayuntamiento de Barcelona aprobó en su última sesión, la del jueves, la suspensión de la admisión de comunicaciones previas de inicio de actividades para la instalación y ampliación del uso de viviendas turísticas. Un nuevo desarrollo del veto vigente con el que el gobierno sociocomún, explican fuentes municipales, quiere “blindar” su capacidad de prohibir la apertura de este tipo de alojamientos ante los posibles cambios normativos que se desprendan del nuevo Decreto de Reglamento Turístico de la Generalitat. Concretamente, se buscaría frenar la posible aparición de un nuevo nicho de negocio: el alquiler de habitaciones.
“Hacemos este refuerzo de la normativa para dejar claro el mensaje de que queremos controlar lo que pasa en relación con los pisos turísticos”, manifestó la teniente de alcalde de Urbanismo, Janet Sanz, en comparecencia ayer ante los medios de comunicación. Según la edil, el gobierno autonómico podría aprobar el próximo mes de diciembre el nuevo reglamento, que se está elaborando desde el 2015, y en el que está previsto que se incorpore el alquiler de habitaciones como una nueva tipología de alojamiento turístico.
La teniente de alcalde aseguró que, depende cómo, la nueva norma autonómica puede “abrir la puerta de atrás” a los apartamientos turísticos ilegales. “Sabemos que quieren legalizar las habitaciones pero no si nos darán la competencia”, añadió Sanz, que defendió que los ayuntamientos son los que tendrían que regular este nuevo alquiler de uso turístico, decidir cuántas puede soportar la ciudad o, por ejemplo, qué días se podrán alquilar o no.
“Se ha trabajado con muy poca transparencia”, afirmó la concejal, que cargó contra la actitud de la Generalitat en la elaboración del reglamento por no haber tenido en cuenta “al mundo local” y de manera más concreta al Ayuntamiento de Barcelona. “Llevamos muchos tiempo reclamando una reunión con la consellera (de Empresa) Àngels Chacón”, aseguró.
La suspensión tendrá una duración de un año. Según explicaron fuentes municipales, durante este tiempo se llevarán a cabo los trabajos necesarios para plantear
La decisión se toma en un momento en el que el actual Peuat está siendo objeto de una intensa batalla judicial
una modificación del Plan Especial Urbanístico de Alojamientos Turísticos (Peuat) que, aunque está vigente, es objeto de una intensa batalla judicial, con sentencias desfavorables, que lo está poniendo en entredicho. De hecho, algunos sectores del sector turístico vieron en la nueva medida del Ayuntamiento una manera de prever el momento en el que el Peuat pueda ser declarado nulo.
Por su parte, la Asociación de Apartamentos Turísticos de Barcelona (Apartur) rechazó la nueva suspensión preventiva que afecta a la admisión de comunicados de apertura y de ampliación de pisos turísticos para reforzar la normativa actual. “En lugar de cerrar los ojos a la realidad con moratorias mal planteadas, creemos que el Ayuntamiento haría bien en trabajar junto con el sector para una regulación que permita a la ciudad alcanzar objetivos compartidos de ordenación, control, calidad, convivencia, sostenibilidad e impuestos”, manifestó el presidente de Apartur, Enrique Alcántara.