El temor al virus pone en jaque grandes eventos oficiales en China y Japón
Xi deja en el aire un acto con 3.000 delegados y Naruhito suspende su cumpleaños
Servicios religiosos, clases en centros educativos, ferias culturales, competiciones deportivas, bodas de renombre .... Cada día que pasa, la lista de eventos cancelados o postergados por culpa del coronavirus y el temor a su propagación suma nuevos nombres. Ayer, le tocó el turno a dos actos políticos de gran relevancia en China y Japón, las dos naciones más golpeadas por el patógeno, una evidencia más de que el Covid-19 sigue generando gran preocupación.
En Tokio, la casa imperial comunicó la cancelación del tradicional saludo público de cumpleaños del emperador Naruhito, que cumplirá 60 años el próximo domingo 23 de febrero. Estaba previsto que ese día el monarca se asomara en tres ocasiones, junto a la emperatriz Masako y otros miembros de la familia real, al balcón del palacio imperial de Tokio para saludar a una multitud que puede alcanzar las decenas de miles de personas. El evento ha sido cancelado “para evitar el posible contagio de los asistentes”, reveló la agencia de la casa imperial.
Motivos similares adujeron los organizadores de la maratón de Tokio para excluir a más de 37.000 corredores aficionados que se habían registrado, por lo que tan sólo los corredores de élite podrán participar. Sus decisiones no sorprenden demasiado si se tiene en cuenta que en el país se han detectado 64 casos –incluyendo el de una mujer de 80 años que falleció– y otros 454 contagios confirmados a bordo del crucero Diamond Princess, que permanece en cuarentena frente a la ciudad de Yokohama desde el 3 de febrero.
Mientras, la prensa estatal china informó de que las autoridades se plantean aplazar la sesión anual del órgano legislativo, la Asamblea Nacional Popular (ANP). Este evento supone la mayor cita anual del calendario político chino, y reúne en la capital a unos 3.000 delegados llegados de todos los rincones del país para promulgar leyes y, al menos en teoría, supervisar la labor del Gobierno.
El próximo lunes día 24, los principales responsables de este órgano se reunirán para decidir si aplazan o no la cita. Aunque no se dio una razón oficial para esa probable demora, todo apunta al alto riesgo para la salud y de contagio que implica seguir adelante con la sesión de la ANP y del Consejo Consultivo, que se celebra en las mismas fechas. Para los analistas, el aplazamiento indicaría la determinación de Pekín por seguir centrada en acabar por todos los medios con el brote que ha puesto en jaque al país.
Hasta la fecha, el Covid-19 ha
En la ciudad de Xiaogan, con 5 millones de habitantes, se prohíbe la salida de casa a todos los residentes
infectado allí a más de 70.000 personas, de las que 1.772 han fallecido, 11.198 han recibido el alta y las restantes 57.671 permanecen bajo tratamiento. La provincia de Hubei sigue siendo la gran castigada, con casi 60.000 casos del total y 1.696 muertos.
Para poner coto a la propagación del patógeno, las ciudades de la provincia han extremado aún más las medidas de seguridad. En la ciudad de Xiaogan, que con cinco millones de habitantes es la segunda más castigada de todas, se ha prohibido la salida de sus casas a todos los residentes urbanos. Tan sólo aquellos con tareas o necesidades especiales –profesionales médicos, enfermos, mujeres embarazadas, etcétera– pueden desplazarse durante un periodo de tiempo designado y a través de rutas habilitadas. A aquellos que osen desobedecer, les esperan 10 días de calabozo.
Además, el Gobierno ha pedido a todos los comercios “innecesarios” que cierren, mientras que obligan a las farmacias a registrar los datos personales de todos aquellos clientes que compren medicinas para un resfriado, tos o fiebre.