La Vanguardia

Los Mossos activan Oris, un plan de actuación policial ante la pandemia

La policía sufre la escasez de mascarilla­s y espera la llegada de termómetro­s láser

- MAYKA NAVARRO

El 17 de agosto del 2017 los Mossos d’esquadra activaron el plan Cronos, un dispositiv­o pensado para que cada policía supiera qué debía hacer y cómo tras un ataque terrorista. Hace un mes, la comisaria técnica de planificac­ión de seguridad empezó a trabajar en el plan que se pondría en marcha en el caso de que coronaviru­s llegara a Catalunya. El jueves pasado, el jefe de los Mossos Eduard Sallent difundió el plan Oris, la biblia de actuación de la policía catalana en esta pandemia.

El plan y sus anexos tiene una cuarentena de páginas en las que se planifica todo lo que se tiene que hacer a partir de escenarios previstos. Y contiene un importante apartado con las pautas de actuación de cada mosso ante situacione­s concretas, aunque la casuística de los que trabajan en seguridad en la calle es tan diversa que habrá margen para el sentido común de los agentes.

El dispositiv­o Oris plantea los diferentes niveles de emergencia de la pandemia y según cada necesidad se activarán policías hasta el nivel máximo en el que todo el cuerpo de mossos estará al servicio de garantizar el confinamie­nto de Catalunya.

Ayer sólo seguían confinados los municipios de la zona de Òdena y para garantizar el aislamient­o se habían movilizado los recursos territoria­les a la Brigada Móvil.

Pero la cuestión es: ¿pueden todos los mossos poner en práctica las pautas del plan Oris? Estos días, los delegados de riesgos laborales de los sindicatos policiales no dan abasto con preguntas y quejas. Los policías, como el resto de mortales, dudan y, ante el bombardeo informativ­o, también temen el contagio.

No todos los mossos tienen mascarilla­s. Las más sencillas, de un solo uso, se terminaron hace días, y en el gran almacén del complejo de Egara quedan unas 5.000 con filtros de partículas que se reservan para los agentes encargados de confinamie­ntos o situacione­s muy concretas. El primer pedido de mascarilla­s no llegará hasta dentro de un mes y, por lo tanto, hay que ingeniárse­las.

Un ciudadano chino de Tremp regaló ayer a los Mossos 2.000 mascarilla­s sencillas. Mientras que en la comisaría de Badalona el jefe de seguridad ciudadana dio un paso al frente ante sus patrullero­s y sacó dinero de su bolsillo para conseguir mascarilla­s. Otros mandos y agentes le secundaron y acabaron reuniendo 400 euros para material.

La lista es amplia. En el área de custodia de detenidos de Barcelona la queja se refiere a la falta de termómetro­s láser para los detenidos y los policías. La comisaría que se encarga del material hace una semana que inició los trámites para comprar 200 unidades. Nada en la administra­ción es de un día para otro.

Como en Cronos ante la amenaza antiterror­ista, los mandos piden elevar la autoprotec­ción con prevención y todo el sentido común.

En la comisaría de Badalona, mandos y agentes reunieron dinero para comprar material protector

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JOAN MATEU / AP Mossos dentro del dispositiv­o Oris que garantizan el confinamie­nto de cuatro municipios de la zona de Òdena, el viernes

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