Detenida la dueña de una protectora por la muerte de 500 animales
Recogía animales, principalmente perros y gatos, de la vía pública para recibir una aportación económica de las administraciones públicas y cuando el animal estaba enfermo o su adopción era difícil procedía a sacrificarlo. La Guardia Civil informó ayer de la detención de la directora y responsable de una protectora ubicada en la comarca del Baix Ebre, en el sur de Catalunya, que con esta práctica habría matado a unos 500 animales la última década.
Según informó ayer el instituto armado a través de un comunicado, la detenida está imputada de los delitos de maltrato animal, falsificación de documentos e intrusismo profesional, dado que la mujer también ejercía funciones de veterinaria sin tener la correspondiente titulación universitaria.
Los agentes del Destacamento de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Deprona) del Parc Natural del Delta de l’ebre iniciaron la investigación de este caso tras conocer que en dos establecimientos de una protectora de animales del Baix Ebre se realizaban prácticas ilegales, entre otras y la más preocupante, el sacrificio de las mascotas cuando no salía a cuenta mantenerlos.
La detenida, según informó ayer el Gobierno Civil de Tarragona, también falsificaba recetas de veterinarios titulados, con las que compraba medicamentos en empresas distribuidoras de las ciudades de Barcelona y Zamora.
En este sentido, el pasado mes de septiembre, agentes de la Guardia Civil procedieron a inspeccionar las instalaciones de la protectora y comprobaron que a los animales se les administraba vacunas, que se expedían recetas y que los tratamientos veterinarios los practicaban personas que no estaban tituladas.
La protectora de animales funcionaba gracias a los convenios de colaboración que había firmado con fundaciones y asociaciones para realizar adopciones y mantenerlos, entidades que llegaron a pagar entre 300 y 350 euros por cada adopción. También recibía dinero de las administraciones públicas por la recogida de los animales de la vía pública.
Los datos recopilados por la Guardia Civil revelan que el mayor número de sacrificios realizados por dicha persona tuvo lugar entre los años 2013 y 2015, con una media de 95 muertes anuales.
En el domicilio de la detenida y en la protectora del Baix Ebre se descubrió material quirúrgico, microchips, cartillas sanitarias en blanco, diferentes medicamentos, vacunas y una mesa quirúrgica donde se realizaban las operaciones.
Un veterinario titulado era el que le facilitaba los microchips y las cartillas sanitarias en blanco, sin que verificara posteriormente el uso que se hacía.
Tras prestar declaración ante la Guardia Civil, la detenida ha sido puesta a disposición de los juzgados de Tortosa.
La mujer ejercía también de veterinaria, a pesar de no tener titulación, y falsificaba recetas