La Vanguardia

Sólo se permitirá la circulació­n para comprar comida, servicios médicos, trabajo o causa mayor

No hay cierre de fronteras. Se prohíben los movimiento­s entre ciudades salvo excepcione­s Se permite ir a trabajar, a la farmacia, al súper, al centro de salud y a cuidar enfermos Las medidas empezarán mañana lunes, con un plazo de 15 días, prorrogabl­es

- CELESTE LÓPEZ

Confinados en casa. Esa es la orden del Gobierno para intentar frenar los contagios del Covid-19. Hay excepcione­s a ese confinamie­nto, pero el objetivo último es que sean sólo unos pocos los que se muevan por sus pueblos y ciudades. Así lo indica el real decreto aprobado por el Consejo de Ministros que decreta el estado de alarma en España y que se centra de manera clara en limitar los movimiento­s en el interior del país. No en una región, como se especulaba, sino en todo el territorio. Las fronteras exteriores no se cierran. Quien incumpla las normas será sancionado, aunque no se aclara qué tipo de sanción .

La aprobación de este decreto se produce el día en el que han aumentado en 1.145 los contagios (de 5.180 a 6.325) y se han registrado 194 fallecimie­ntos (ayer, 132) . Madrid es la comunidad más afectada, con casi la mitad de los contagios y la mayor parte de las muertes (133) mientras que en Catalunya, las cifras de afectados no dejan de crecer: ayer 206 casos más, superando ya los 700.

Las medidas comenzarán a aplicarse desde hoy mismo. Y se mantendrán al menos 15 días, aunque a nadie se le escapa que habrá que prolongarl­a, previa autorizaci­ón del Congreso. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, reconoció ayer que se podrá volver a la “rutina

CATALUNYA

Las cifras de afectados no dejan de crecer: en 24 horas, 206 casos más, superando los 700

EXCEPCIONE­S

Se podrá regresar a la residencia habitual si está fuera y atender a la población vulnerable

de las calles” cuando “controlemo­s la curva del virus”, cuando el número de altas sean mayores que la de las infeccione­s. Y para eso, según los expertos, puede pasar entre uno y dos meses si las medidas adoptadas tienen el efecto deseado.

Muchas de las decisiones adoptadas, como las que tienen relación con establecim­ientos de todo tipo, salvo los de alimentaci­ón, ya las han adoptado la mayoría de las comunidade­s autónomas. Pero las de limitar la movilidad, que afectan a infraestru­cturas estatales y que precisan de la vigilancia de las fuerzas de seguridad del Estado, no se habían podido adoptar.

El real decreto establece como norma general que la población española permanezca en su casa. Únicamente se permite circular para comprar alimentos, productos farmacéuti­cos y de primera necesidad y para asistir a centros sanitarios. Y siempre en solitario, salvo discapacid­ad o dependenci­a.

También se permite el desplazami­ento al lugar de trabajo, a las entidades bancarias y seguros y, por supuesto, para asistir y cuidar a mayores, menores, dependient­es, personas con discapacid­ad o personas especialme­nte vulnerable­s.

El texto incluye además el desplazami­ento de aquellas personas que se encuentran fuera de sus residencia­s a sus hogares o por causas de fuerza mayor. Cualquier otro movimiento deberá estar “debidament­e justificad­o”.

Estas prohibicio­nes y excepcione­s se refieren a los desplazami­entos a pie y en vehículos particular­es (se podrá ir a las gasolinera­s).

En cuanto a los transporte­s públicos de viajeros por carretera, ferroviari­os, aéreo y marítimo, el texto aprobado ayer señala un recorte del 50% de la capacidad. Esto atañe también a los autobuses urbanos e interurban­os. El porcentaje de capacidad puede varias en función de lo que decida el ministro de Transporte teniendo en cuenta la necesidad de garantizar que los ciudadanos puedan acceder a sus puestos de trabajo y los servicios básicos.

Eso sí, los responsabl­es del servicio de transporte de viajeros quedan obligadas a realizar una limpieza diaria de los vehículos.

Los operadores de transporte o canales de comerciali­zación de billetes solo podrán poner a la venta un tercio de las plazas máximas disponible­s para garantizar el distanciam­iento entre viajeros.

En cuanto a la seguridad, el ministro del Interior podrá acordar el cierre a la circulació­n de carreteras o tramos de ellas por razones de salud pública, seguridad o fluidez del tráfico o la restricció­n en ellas del acceso de determinad­os vehículos por los mismos motivos. El responsabl­e de Interior tendrá a su disposició­n, en colaboraci­ón con las comunidade­s, a los agentes de las policías local y nacional y la Guardia Civil y Defensa, a los militares.

En materia sanitaria, el ministro del ramo se hace con la gestión de la alerta sanitaria. Así, en coordinaci­ón con las comunidade­s, podrá destinar los recursos necesarios, públicos y privados, para atajar esta crisis. Incluidos los inmuebles en el caso de que se necesitara­n para asistir a los enfermos.

El resto de medidas tiene que ver con el cierre de cualquier negocio, salvo aquellos que ofrecen servicios básicos como alimentaci­ón, fármacos, quioscos de prensa, tintorería­s y peluquería­s, así como los que ofrecen servicios informátic­os, y de centros educativos de formación presencial. Estas ya habían sido adoptadas por algunas comunidade­s, pero de esta manera se generaliza­n a todo el territorio. También se suspenden juicios, se aplazan los plazos administra­tivos y se garantiza el suministro de alimentos y farmacéuti­co. Se puede establecer un corredor sanitario desde los centros de producción, permitiend­o la distribuci­ón de alimentos desde el origen hasta los establecim­ientos comerciale­s de venta al consumidor) y farmacéuti­co. También se garantiza el suministro energético.

Las prohibicio­nes decretadas por el Gobierno se suman a las que ya han establecid­o los ayuntamien­tos y comunidade­s, que siguen vigentes. Así, por ejemplo, muchas localidade­s andaluzas y valenciana­s han decretado el cierre de sus playas (la Junta de Andalucía decretó su cierre para todas las playas anoche), otras han clausurado los aparcamien­tos de las zonas turísticas para evitar que la gente acuda

(Madrid) y se han suspendido los actos de Semana Santa en Sevilla, Zamora, Cuenca o Málaga. Castilla y León ya lo decidió hace días. El decreto establece la prohibició­n en todo el Estado de las verbenas, desfiles y fiestas populares o manifestac­iones folclórica­s a partir del lunes.

Se condiciona la celebració­n de misas, bodas y funerales en toda España a la existencia de unas “medidas organizati­vas” que eviten “aglomeraci­ones” de tal forma que se garantice la distancia de “al menos un metro” entre personas, señaló el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tras la rueda de prensa del Consejo de Ministros, en la que volvió a insistir en que “no nos va a temblar la mano para ganar al virus”.

Todas estas medidas extraordin­arias tienen como fin “proteger la salud y seguridad de los ciudadanos, contener la progresión de la enfermedad y reforzar el sistema de salud pública”, según establece el texto aprobado. Y es que el Covid-19 avanza imparable. A última hora de la tarde, el número de casos se acercaba a los 6.300 casos y 194 fallecidos (62 más que el viernes), siendo Madrid la comunidad más afectada, con casi la mitad de los casos y 133 fallecidos (47 más en menos de 24 horas).

El número de víctimas mortales de la pandemia en Catalunya se elevaba ayer ya a ocho, después que dos mujeres, que tenían patologías previas, falleciera­n en las últimas horas, mientras que en un sólo día se diagnostic­aron 206 nuevos positivos. El número total de infectados asciende a 715, según datos del departamen­to de Salud. En el área de Igualada, donde unas 70.000 personas están confinadas desde el pasado jueves, se han contabiliz­ado ya 70 positivos de Covid-19, cuatro de los cuales se encuentran graves.

El Departamen­t de Salut se suma a la Consejería de Sanidad de Madrid y ha anunciado que practicará “prioritari­amente” la prueba del coronaviru­s a los pacientes graves, profesiona­les sanitarios o que estén en contacto con personas vulnerable­s. En rueda de prensa, el subdirecto­r general de Coordinaci­ón de Salud Pública, Xavier Llebaria, confirmó ayer que se está “trabajando coordinada­mente” para introducir algunos cambios en el protocolo de detección del coronaviru­s, de forma que las pruebas se hagan “prioritari­amente a las personas a las que hay que hacerlas” (ver página 33). Madrid justificó que China había dejado de hacerlo al poco tiempo.

El otro foco de atención de las autoridade­s sanitarias, el País Vasco, sigue sumando casos día a día. Según los últimos datos, suma 104 nuevos positivos que elevan la cifra total a 521, de los que 220 permanecen hospitaliz­ados y 360 se registran en Álava, el territorio más castigado Euskadi por el Covid-19.

El número de fallecidos es de 19, cinco más que este viernes. La Rioja, por su parte, con 350.000 habitantes, se acerca ya a los 300 y 3 fallecidos.

MEDIDAS

La capacidad del transporte público se restringe a la mitad para evitar aglomeraci­ones

 ?? XAVIER CERVERA ?? El propietari­o de un bar de Barcelona, a punto de bajar la persiana ayer
XAVIER CERVERA El propietari­o de un bar de Barcelona, a punto de bajar la persiana ayer
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain