Torra denuncia la “intervención encubierta” de los Mossos
El Ejecutivo vasco pide que se respeten sus competencias en sanidad y seguridad
El Gobierno catalán y el vasco criticaron que el decreto de estado de alarma pone a los Mossos y la Ertzaintza a las órdenes del Ministerio del Interior y reivindican sus competencias.
“Un 155 encubierto”. Lo advierten, en privado, en el Palau de la Generalitat. Lo verbalizan, en público, en Ajuria Enea. El decreto de estado de alarma contra el coronavirus discutido y aprobado ayer en la Moncloa activó todas las señales de aviso en los gobiernos de Catalunya y el País Vasco, que al unísono salieron en defensa de su estatus competencial: colaboración en la lucha contra la pandemia, toda; pero nada de recentralización de materias transferidas como sanidad o seguridad.
En Barcelona y Vitoria se recibió con suma preocupación un decreto de estado de alarma que faculta al Ministerio de Interior que pilota Fernando Grande-marlaska a asumir el control de las policías autonómicas y locales. En concreto, el texto detalla que en el marco de las acciones contra el Covid-19, Mossos d’esquadra y Ertzaintza “quedarán bajo las órdenes directas del titular del Ministerio de Interior en cuanto sea necesario para la protección de personas, bienes y lugares, pudiendo imponerles servicios extraordinarios por su duración o naturaleza”. También se incluye el “cierre a la circulación de carreteras por razones de salud pública o seguridad”, previa información a la autonomía correspondiente si tiene competencias en tráfico.
En el decreto de estado de alarma se añade que en estas comunidades autónomas con policía propia, como son Catalunya y Euskadi, se recurrirá a las Juntas de Seguridad para fijar los mecanismos de coordinación. Con todo, desde el Palau de la Generalitat se da por hecho que, de facto, con el decreto los Mossos quedarán sometidos al mando de Grande-marlaska. De este modo, dos años y medio después del referéndum del 1-O y la aprobación del 155, la coordinación de los cuerpos policiales en Catalunya –agentes de los Mossos, Policía Nacional y Guardia Civil– volverá a depender del Ministerio de Interior.
Capítulo aparte, los ejecutivos catalán y vasco también recelan de que el decreto abra la puerta a que el Ministerio de Sanidad de Salvador Illa centralice las competencias de las autonomías con la posibilidad, por ejemplo, de redistribuir profesionales sanitarios en el territorio para completar la atención médica en toda España.
“No permitiremos que se vulneren nuestras competencias”, respondió ayer la portavoz del Govern catalán, Meritxell Budó, para salir al paso de un decreto que entonces aún no era público, pero del que ya se había filtrado su borrador. “Es una invasión competencial”, censuró insistentemente para manifestar el “malestar” de la Generalitat con el proyecto diseñado en Moncloa.
Desde el Govern argumentan que sus equipos de emergencias, cuerpos de seguridad y los sanitarios “ya están actuando con responsabilidad”. Ello lo contraponen con la gestión del Ejecutivo central al que acusan de “actuar tarde y mal”. “Nosotros vamos un paso por delante”, agregó el conseller de Interior, Miquel Buch.
De hecho, uno de los miedos que tienen en la Generalitat es que a partir de la publicación del estado de alarma no podrán actuar sin pedir permiso a Madrid, mientras que hasta ahora tenían cierto margen de maniobra.
En cualquier caso, la portavoz Budó se emplazó a la cita por videoconferencia que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, debe mantener esta mañana con los líderes autonómicos, para expresar su rechazo a las medidas. Ayer sí que ya hubo contactos entre el Palau de la Generalitat y ministros de ambos partidos, PSOE y Unidas Podemos, para afear el “155 encubierto”. También se habló con el PSC y los comunes, que guardaron silencio. Por contra, desde Cs y el PP catalán cargaron contra el Govern por “poner las cosas difíciles” en plena pandemia y pidieron unidad. Desde Palau también se llamó al lehendakari Iñigo Urkullu, con quien Torra coincidió en que “no pueden aceptar que el Gobierno español confisque sus competencias en sanidad, seguridad y transportes”. “El virus del centralismo no descansa ni en tiempos de pandemia”, atizó Carles Puigdemont, desde Bélgica.
En Euskadi, las dudas sobre el futuro competencial del territorio tras la asunción del Gobierno de Sánchez de un “mando único” también dieron lugar a fricciones y resistencias. El gabinete de Iñigo Urkullu, a través de su portavoz, Josu Erkoreka, aseguró que sería una “sorpresa” que el Ejecutivo central anulara las competencias vascas en seguridad y salud y “abocara para sí todas las atribuciones”. “Sería un 155 que en principio no estaba en las conversaciones mantenidas entre el lehendakari y Pedro Sánchez”, indicó.
Erkoreka criticó la hipótesis de que el presidente se haga cargo, en virtud del estado de alarma, de algunas materias recogidas en el Estatuto de Gernika y explicó que, en la conversación telefónica que mantuvieron la noche del viernes Urkullu y Sánchez, éste no trasladó ninguna posible invasión competencial. “No fue esa la tónica”, recalcó. Por el contrario, dijo, el Gobierno vasco advirtió en Sánchez una actitud “respetuosa” y una “voluntad de continuar trabajando conjuntamente” en un “marco de cooperación” como el que “han venido desarrollando los dos ejecutivos esta última semana”.
El propio Urkullu se refirió por la mañana a las posibles consecuencias del mando total tras la declaración del estado de alarma y lo hizo instando a Sánchez a que las medidas que adoptara el Consejo de Ministros tuvieran como referencias “el modelo territorial, la configuración en base al ordenamiento jurídico y el autogobierno”.
“Me resultaría extraño que hubiera otras directrices o medidas”, subrayó lehendakari Urkullu, a la vez que puso como ejemplo de actuación de cara las próximas semanas la “perfecta coordinación y comunicaciones existente en el ámbito sanitario”.
QUIM TORRA
“No podemos aceptar que el Gobierno español confisque nuestras competencias en salud y seguridad
IÑIGO URKULLU
“Con la coordinación existente en sanidad me resultaría extraño que hubiera otras directrices
MERITXELL BUDÓ
“Los equipos de emergencias, seguridad y sanitarios ya están actuando con responsabilidad
JOSU ERKOREKA
“Sería un 155 que en principio no estaba en las conversaciones mantenidas entre el lehendakari y Sánchez
CARLES PUIGDEMONT
“El virus del centralismo no descansa ni en tiempos de pandemia; grave error de Sánchez e Iglesias