Vueling y Air Nostrum engrosan la cascada de despidos temporales
Aena cierra terminales en Barajas y El Prat por el desplome de la actividad
El sector aéreo está sumido en una crisis de enormes proporciones que se agudiza a medida que avanzan los días. Las restricciones de vuelo mantienen a la gran mayoría de flotas en tierra y la industria afronta pérdidas de ingresos millonarias, con la viabilidad de algunas compañías en la picota.
Los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) en las aerolíneas no hacen más que crecer y ayer dos nuevas empresas, Vueling y Air Nostrum, se sumaron a la cascada de ajustes de plantilla que la semana pasada iniciaron en España Iberia, Norwegian o Volotea. En el caso de la aerolínea catalana, perteneciente al grupo IAG, el ERTE afectará a toda su plantilla, más de 3.800 trabajadores, hasta el 30 de junio, si bien ha pedido que pueda ser modificado en función de los acontecimientos.
El personal de vuelo –pilotos y cabina– verá reducida su jornada un 90%, según los sindicatos, mientras que para el resto del personal de oficina la reducción de la jornada será del 70%. En estos momentos Vueling tiene la mayoría de su flota en tierra y opera con menos de una cuarta parte de su capacidad. La aerolínea de bajo coste adaptará la disminución de jornada en función de su actividad.
Air Nostrum, por su parte, empezó a aplicar este lunes un ajuste temporal para toda su plantilla, 1.439 empleados, a la espera de que la autoridad laboral autorice a lo largo de esta semana la propuesta presentada el pasado viernes por la empresa. Las plantillas de los colectivos de vuelo, pilotos y tripulantes de cabina de pasajeros estarán afectadas por el ERTE entre el 90% y el 100%, mientras que los técnicos de mantenimiento de aeronaves se verán afectados en función de las bases, con un umbral de entre un 50% y un 100%. Con estos dos últimos ERE temporales, el sector aéreo en España ya suma al menos 20.000 trabajadores afectados. Una difícil situación que volvió a reflejarse ayer en las caídas que Aena e IAG sufrieron en bolsa, del 18,929% y el 9,575% respectivamente.
La prohibición de volar y las restricciones a la entrada de turistas aprobadas por la Unión Europea y el Gobierno ha bajado al mínimo la actividad. Los aeropuertos de la red de Aena registraron este lunes un total de 805 operaciones, lo que supone un 84% menos que el mismo domingo de la semana anterior, según anunció la secretaria general de Transportes y Movilidad, María José Rallo.
Un desplome que ha obligado a Aena a cerrar temporalmente algunas de las terminales de su red. El gestor aeroportuario anunció ayer que, en el caso de Barajas, concentrará todos los vuelos de la T2 y la T3 en la T1 y, posteriormente, agrupará todas las operaciones en la T4. En el aeropuerto Josep Tarradellas Barcelona-el Prat se concentrarán todos los vuelos en las zonas A y D de la T1, cerrando la operativa de la T2.
El aeropuerto de Palma de Mallorca también será reorganizado, manteniendo sólo los módulos B y D, mientras que en Eivissa y Menorca se mantendrá la configuración reducida de la temporada de invierno.
En Gran Canaria se cerrarán asimismo dos terceras partes del edificio de la terminal.
El sector aéreo suma al menos 20.000 trabajadores afectados por los ajustes de plantilla