Rediseñar nuestra vida
De repente hemos tenido que buscar maneras de adaptar familia y trabajo en un solo espacio
Nos acaban de poner a prueba. Todo el mundo –sin excepción– se ha tenido que reconvertir. De un día para otro ha cambiado de tal manera nuestro escenario, contexto y realidad que nos hemos visto forzados a diseñar nuevas dinámicas, procesos y sistemas en el trabajo y en casa.
Seguramente saldremos de esta más humildes, más cercanos y más humanos, pero de momento todos nos hemos tenido que reinventarnos de forma radical en un tiempo récord. De un día para otro hemos tenido que demostrar flexibilidad y adaptabilidad, y dejar claro que la habilidad más importante es la capacidad de reconvertirse.
Hace dos días, todo el mundo hablaba de la importancia de salir de su zona de confort. Pues bien, ahí van –y de golpe– dos tazas. Y ante esta crisis, el cambio ha tenido que ser radical. Nos hemos visto forzados a convertir nuestras casas en oficinas y a trabajar online de un día para otro. Y no sólo esto.
Hemos tenido que aprender a convivir, conciliar y trabajar en un único espacio y con una situación totalmente nueva: la de tener a los niños jugando entre las piernas las 24 horas del día. Y de ahí otra gran oportunidad. Poner a prueba el modelo happy friendly, una filosofía de trabajo que se basa en conciliar de manera eficaz y productiva la vida familiar con la profesional.
De la noche a la mañana, hemos tenido que demostrar que nuestras organizaciones pueden ser flexibles y capaces de adaptarse a la vida familiar y a la vez seguir siendo eficaces, eficientes y rentables. También hemos tenido que dejar de trabajar por tareas y empezar a trabajar por objetivos, un nuevo sistema en el que prima la responsabilidad, la confianza y la humanidad dentro del equipo.
Nosotros, en The creative agency (TCA), lo hemos hecho a golpe de rutinas claras, dinámicas de equipo muy marcadas, mucha confianza, y una propuesta de calendario de conciliación que pasa por pactar una agenda con las parejas, y diseñar un listado de actividades para que cada uno se responsabilice de los niños en horarios pactados.
Aquí va un ejemplo, de cómo gestiono desde casa a un equipo de 20 personas y a mi propia familia. Es sólo un ejemplo, pero se puede adaptar a diferentes familias con necesidades distintas.
Delas 6 halas 8h: Organizar el día, correos, trabajo de concentración, redacción, creación e ideación. Aprovechar las primeras horas del día. La mente está clara y fresca.
Dela s8 halas 9h: Despertar a los niños y lanzarse al deporte con ellos. Todo lo que no hagas antes de las 10 ya no lo harás. Así que planifica clases de yoga, de fitness o maratones en el pasillo de tu casa.
De las 9 halas 9. 25h: Desayuno en familia y planificación de las actividades del día. Dibujo, lectura, ilustración, manualidades, expresión oral, ducha, comida... Es importante diseñar el plan con tu hijos para que lo sientan como propio y lo cumplan a rajatabla. Algunas actividades se hacen en familia, otras las hacen solos.
De las 9.30 halas 10.30h: Reuniones online con el equipo de TCA. Conviene hacer reuniones por departamentos, ejecutivas y con objetivos claros para no perder el tiempo. Máximo 10 minutos cada una y con una dinámica clara y ágil.
De las 10.30 halas 12h: Llamadas, seguimiento de proyectos, correos, skypes, reuniones online.
De las 12 halas 14h: Actividad con niños y comida. Pintar, cantar, explicar cuentos, construir cabañas, hacer dibujos para el balcón, disfrazarnos, reinventarnos. Tiempo totalmente focalizado en ellos. Evitar querer estar en tres cosas a la vez. Siempre sale mal.
14 h: Compartir todo lo que han hecho durante la mañana en formato cuento para practicar la expresión oral, y siesta obligatoria. Tú la aprovecharás para avanzar trabajo.
De las 14.10 h a las 17 h: Comida delante del ordenador y de nuevo trabajo de concentración y creación. Planificación de la tarde y reunión de equipo para el seguimiento de proyectos.
De las 17 h a las 18 h: Skype familiar y con amigos. El momento social del día ha llegado y es importante no saltárselo. Es importante que los niños sigan viendo a su tribu social y a su familia.
De las 18 h a las 19 h: Bañera, masaje, pijama. Conviene que sea larga para que se vayan relajando. Si queda tiempo, leemos algún cuento. Recomiendo que sean ellos los que lo expliquen.
De las 19 h a las 20 h: IG Live. Momento para compartir la situación que vivimos con diferentes creativos, artistas, y líderes de opinión. ¿Cómo lo viven? ¿Cuáles son sus rutinas? ¿Cómo se sienten? ¿Cómo ha cambiado su perspectiva de la sociedad?
20 h: Yoga. Intento que sea a solas, pero muchas veces se convierte en yoga en familia, lo que pasa a ser un circo.
21 h: Cena y una actividad tranquila. Cocinamos juntos y hacemos una última actividad tranquilos antes de ir adormir. Estos días nos vamos a dormir mucho más tarde. Intentamos evitarlo, pero no dejan de ser días especiales.