La Vanguardia

La noche que oí ‘Resistiré’

- Joaquín Luna

Desde que decidí ponerme el mundo por montera a eso de los cuarenta, la vida es bastante más divertida. De modo que el sábado 3 de agosto del verano pasado, me dije: hoy te vas a ver al Dúo Dinámico y sin compañías, lo pasarás en grande.

El Dúo Dinámico actuaba esa noche en los jardines de Terramar de Sitges. Gira 60.º aniversari­o. Se dice pronto. Sesenta años de carrera y nunca me había dignado a escucharle­s, hijo –y veleta– de tiempos con ínfulas. Ver al Dúo Dinámico, claro, era cosa de horteras.

Y eso que Manolo de la Calva y Ramón Arcusa, barcelones­es, eran casi del barrio y trabajaron de aprendices en la Elizalde, fábrica de motores, como mi padre. Yo, modestia aparte, crecí en una calle, Sardenya, muy artística: José Guardiola y los Hermanos Calatrava.

Llegué con tiempo, una entrada de gallinero –agotaron el papel– y la sensación de reparar un error: la mala relación con la cultura popular española, ninguneada por el antifranqu­ismo y la cultureta –tan enquistada en la Generalita­t, lo que explica que si pidiese alguna medallita para el Dúo Dinámico me mirarían con desdén montserrat­ino y un váyase a la mierda y no moleste–.

Manolo y Ramón, ya puestos: 60 años en la carretera. On the road.

Chupa del frasco, Carrasco. Tienen donde caerse muertos y allí estaban, con la entrega del principian­te –los principian­tes de hoy se las dan de másters– y un concepto capital: el cantante se debe al público.

Reconozco que ignoraba la amplitud del repertorio y por qué siendo barcelones­es me resultaban tan marcianos. Yo iba a curiosear y verlas venir, como el novato que desciende al subterráne­o de Les Chandelles de París, el periodista que cubre su primera guerra o el paria al que sientan a una mesa que despliega un arsenal de cubertería.

¡Y cómo disfruté! Porque lo que proponen me llena. Y lo que cantan despierta las cuatro tonterías de la vida. Porque hablaron con naturalida­d en mis dos lenguas. Entre chorradas y pijadicas, un gran recital al que había tardado demasiado en asistir: Quisiera ser, Perdóname, Como ayer, Quince años...

Por suerte, las improvisac­iones del agosto urbano y las cosas de Almodóvar, tuve el privilegio de escuchar Resistiré en las voces de dos artistas que llevan sesenta años al pie del escenario, sin prestigio social, banderas al viento o un especial en TV3. Resistiré, resistirem­os.

Sesenta años ‘on the road’ y hasta agosto no me había dignado a ver al Dúo Dinámico...

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain