¿Cuánto necesitas, presidente?
En 1961 los jugadores del Barça ofrecieron ayuda económica al club
La edificación del Camp Nou dejó al Barça endeudado hasta las cejas y el declive deportivo que se acabaría de consumar con la derrota de Berna el 31 de mayo de 1961 no hizo sino complicar la situación. El club perdía agua por todas las grietas y en esta situación se produjo una reacción inesperada de la plantilla...
“Estábamos reunidos con el presidente en funciones, Julià de Capmany [se hizo cargo del club tras la dimisión, en febrero de 1961, de Francesc Miró-sans], y el gerente, Joan Gich. Entonces entró un empleado, Carbonell, y nos dijo que un grupo de jugadores quería hablar con nosotros...”. La anécdota (¿irrepetible?) la reveló por vez primera el economista Fabián Estapé, directivo blaugrana en aquella época. Pero tardó casi 40 años en hacerlo. Sucedió en uno de los excepcionales programas de TV3 sobre el centenario del FC Barcelona, Aquest any 100. En su día nadie dijo nada, nadie supo nada del bello gesto de aquellos futbolistas. Explicó Estapé: “Ahí estaban, eran cinco, todos de la casa: Ramallets, Juanito Segarra, Gràcia, Torres i Vergés. Aunque no era el capitán, quien habló fue Ramallets. ‘Sabemos que el Barça está pasando apuros económicos y queremos decirles que todo el dinero que hemos ganado lo hemos ganado gracias al Barça. Si creen que ahora lo necesitan, se lo prestamos, ya nos lo devolverán cuando puedan’, nos dijo”.
Estapé agradeció la oferta. Recordaba que incluso se emocionaron en aquellas circunstancias. “Pero les pedimos que sobre todo aquello no podía saberse. ‘Que no salga de estas cuatro paredes’, les dije. Porque si corría la voz la gente iba a pensar que estábamos en quiebra y eso podía ser muy perjudicial para el Barcelona”.
En un artículo aparecido en la revista oficial del club, en el 2006, fue el propio Ramallets quien explicó la insólita situación. “El momento económico era muy delicado, pero a nosotros nunca se nos dejó de pagar cuando tocaba. No sabría decir de quién fue la idea, pero nos pusimos de acuerdo los cinco enseguida. Era preciso que el club atendiera a otros pagos más importantes y vimos que nosotros podíamos esperar”.
Ramallets, quizá con una cierta dosis de inocencia, comentó también: “Creo que hoy en día pasaría tres cuartos de lo mismo. Es evidente que todo ha cambiado mucho y que los momentos no son comparables, entre otras cosas porque entonces de los 25-30 jugadores de la plantilla 20 o 22 éramos de casa”.
También es cierto que el reparto de gastos del club es completamente distinto. Si en la actualidad alrededor del 60 por ciento del presupuesto del FC Barcelona se destina a la masa salarial, en aquellos tiempos la situación era otra, poco comparable. Un ejemplo: en una asamblea de pocos años más tarde el Barcelona presupuestaba unos gastos de 95 millones de pesetas (570.000 euros) de los que poco más de 20 millones correspondían a la suma de fichas, sueldos y primas. En sentido contrario, 65 millones de los 95 de ingresos previstos para cuadrar el balance correspondían a los abonos del Camp Nou y la venta de entradas.
LA PROPUESTA DE RAMALLETS “Todo lo que hemos ganado se lo debemos al Barça; si ahora el club lo necesita, se lo prestamos”