Las ventas de coches sufren una debacle y caen casi un 70% en marzo
El sector afronta la peor crisis de su historia y pide un programa de ayudas
Aunque esperada, la debacle es espectacular. Con los concesionarios cerrados desde la declaración del estado de alarma, las ventas de coches en España cayeron en marzo un 69,3%. En el conjunto del trimestre el desplome alcanza el 31%, hasta 218.705 unidades.
“Nos encontramos ante un mes y unos registros de ventas sin parangón en la historia de las matriculaciones en España, como también nos encontramos como país ante una de las crisis sanitarias más complejas y duras enfrentadas jamás. Las ventas están paralizadas y esta situación se prolongará, al menos, mientras dure el estado de alarma”, dijo Noemi Navas, la portavoz de la asociación de fabricantes Anfac. “Vamos a necesitar un plan de choque de relanzamiento del sector que sirva para recuperar rápidamente el mercado y la producción, con unos planes de ayuda a la compra que se centren en la renovación integral del parque”, añadió.
También para los concesionarios “el descalabro es histórico”. Su portavoz Raúl Morales pronostica que “con los concesionarios cerrados, se espera un mercado inexistente o con caídas cercanas al 90% los dos próximos meses. Pese a ello, deberíamos aspirar a tocar fondo antes de que acabe el primer semestre y trabajar duro en la segunda mitad del año para arrancar de nuevo el sector”. Faconauto también demanda que se “dejen de cometer los errores de coordinación y criterio entre el Gobierno y las comunidades autónomas que estamos viendo, e incluso entre los diferentes ministerios, a la hora de poner en marcha medidas económicas y laborales necesarias para amortiguar el impacto de la pandemia, pero que están resultando unilaterales y tendrán efectos negativos para las empresas, para los trabajadores y, por extensión, para la recuperación”
El sector reclama poder prolongar los actuales ERTE, que han dejado paralizada a toda la industria y a la distribución más allá del levantamiento del estado de alarma. “En lugar de que todos los ERTE terminen cuando acabe el estado de alarma, sería bueno que se aceptara una reincorporación gradual del personal sometido a estos expedientes temporales, ajustándola al ritmo de recuperación, precisamente para proteger a los trabajadores. De lo contrario, se convertirán en ERE por causas económicas. Y, desde luego, el aumento del desempleo aumentará también la desconfianza de los inversores y de los propios consumidores”, subrayó Tania Puche, de la asociación de vendedores Ganvam.
En un mercado en mínimos, Seat fue la marca más vendida, pese a sufrir una caída del 45%, seguida de
Toyota y Volkswagen. También el Seat León consiguió el liderazgo, seguido del Nissan Qashqai y el Seat Arona. Ninguno de ellos alcanzó la cota de las 2.000 unidades vendidas.
También en Francia el mercado colapsó en marzo, con una caída del 72,5%, según los datos facilitados por la patronal de fabricantes CCFA. En el conjunto del trimestre la disminución es del 34%. Los primeros pronósticos de los analistas apuntan a una caída de las ventas en todo el mundo de entre el 10% y un 20%, con Europa Occidental como el área más perjudicada, y se estima ya que el sector necesitará ayudas públicas para salir del agujero. Para la consultora IHS Markit, se espera un caída sin precedentes, porque todos los continentes están afectados. IHS Markit anticipa que se venderán 10 millones de coches menos de lo que se esperaba en enero, lo que supondría un descenso de más del 12% en comparación con 2019 ( 78.8 millones de unidades).
Los vendedores piden prolongar los actuales ERTE cuando se levante el estado de alarma