Las máscaras de buceo de Decathlon, más cerca del uso sanitario

Decathlon ha proporcionado hasta la fecha más de 5.300 unidades de su máscara de buceo Easybreath a hospitales en toda España. El Gregorio Marañón es uno de los varios centros en los cuales se trabaja para poder adaptar su uso al de mascarilla o asistente en la respiración a pacientes con Covid-19.

De cara a su empleo con enfermos, se están diseñando adaptadores con impresoras 3D que permitan acoplar estas máscaras a los sistemas de respiración y mantengan cierta presión del aire sobre los pulmones para ayudar en la ventilación. Con ello, las reconvertidas máscaras de buceo harían una función intermedia entre respirador y mascarilla con reservorio –aquellas que llevan una bolsa acoplada–.

Desde el Gregorio Marañón afirman que los resultados indican una mejora en la saturación de oxígeno.

El otro posible uso en el que se está trabajando es como equipo de protección para los profesionales sanitarios. En este caso, el filtro del adaptador haría las funciones de mascarilla a lo que se añadiría el papel de la máscara como pantalla de protección. El hospital Ramón y Cajal, el Infanta Leonor o La Paz también se encuentran en la lista de centros madrileños que están trabajando en la nueva tecnología.

En Barcelona, este fin de semana se inició una campaña de recogida para el hospital del Mar que, según fuentes del hospital, por el momento se ha paralizado dado el gran número de máscaras recibidas. Los resultados de las pruebas necesarias para probar su validez como uso sanitario no tardarán en llegar y, en caso de ser positivos, el uso del modelo de Decathlon podrá implementarse en el hospital catalán.

En una situación similar se encuentra el hospital Sierrallana de Cantabria. El centro ya ha recibido algunas unidades y, junto con el hospital Virtual Valcecilla, están valorando su uso en pacientes. Por el momento ninguno de los adaptadores, ni para enfermos ni para facultativos, ha sido homologado pero se espera alcanzar este objetivo.