Leyenda del soul
BILL WITHERS (1938-2020) Cantautor
El que era considerado uno de los cantantes más elegantes del soul murió a los 81 años, el pasado día 30 de marzo, a causa de una dolencia cardiaca. Si bien llevaba tiempo alejado de la primera línea, Bill Withers será recordado, sobre todo, por ser el autor de Ain’t no sunshine, Lean on me y Use me, grandes canciones emblemáticas de la historia del soul. Pero este cantante de sedosa voz, nacido en la rural Virginia, tuvo una importante carrera que se extendió, en su época de mayor esplendor, a través de las décadas de los setenta y los ochenta. También fue músico de músicos, sumamente versionado, hasta el extremo que Al Jarreau grabó un álbum completo con sus canciones, Sings Bill Withers (1987).
Hijo pequeño de una familia con seis hermanos, pasó una infancia difícil tras la prematura muerte de su padre. Educado por su madre y abuela, sirvió luego nueve años en la marina antes de mudarse a Los Ángeles para iniciar su carrera musical en 1967. La suerte empezó a irle de cara cuando se fijó en él Booker T. Jones, que le produjo su primer álbum, Just as I am, para el sello Sussex, que incluía el mítico single Ain’t no sunshine. Este alcanzó rápidamente los primeros puestos de las listas de rhythm and blues y pop catapultando su popularidad en el verano de 1971, hasta el extremo de llevarle a ganar un Grammy.
El otro sencillo, Grandma hands”, tuvo una repercusión menor.
Su segundo álbum, Still Bill, contenía Use me y Lean on me, una canción esta última inspirada por su adolescencia en una ciudad minera cuya precariedad laboral hacía que todos fuesen una piña, de ahí su tono gospelsoul propulsado por piano eléctrico y arreglos orquestales. Fue un rotundo numero uno y la cúspide de su carrera en el verano de 1972.
La estancia en Sussex terminó con +’Justments (1974), álbum que incluye el single The same love that make me laugh, versionado luego por Diana Ross. La relación con el sello terminó de manera agria con una disputa legal antes de pasar a engrosar las filas de Columbia –que luego compró sus primeros discos–, donde debutó con Making music (1975), al que siguió Naked & warm (1976), Menagerie (1977) y
Bout love (1978) en una curva de éxito decreciente.
También contribuyó a la banda sonora del western El hombre y el niño, protagonizado por Bill Cosby, además de hacer célebres duetos con Bobby Womack
(It’s all over now) y Grover Washington jr., en la balada Just the two of us, que fue un éxito en 1981.
Su último disco que gozó de cierta popularidad fue Watching you, watching me (1985). Cuatro años después, en un raro gesto, decidió aparcar su carrera para dedicarse a la familia y amigos.
A pesar de ausentarse del negocio del espectáculo sus primeros discos se convirtieron en referentes, en constante reedición, sumando además versiones, como la que hizo Aaron Neville de Use me. Y no sólo eso, ya que sus canciones también se convirtieron en carne de sampler para las generaciones del hip-hop.
En el nuevo milenio volvió para actuar en directo y recibir los parabienes de la industria. Así, en el 2014, obtuvo un Grammy honorífico por todos sus álbumes, los ocho de estudio y el doble en directo Live at Carnegie Hall (1973). Los honores culminaron al año siguiente al ser incluido en el Rock and Roll Hall of Fame de la mano de Stevie Wonder. Ubicado ya en el mismo panteón de los grandes, donde moran Marvin Gaye o Curtis Mayfield, el documental Still Bill arroja luz sobre su vida, tanto pública como privada.