Cuentos para soñar
Literatura infantil y juvenil Diez propuestas de lectura para antes de ir a dormir
Deberes, manualidades, juegos, pintura, cocina... La inventiva en las casas donde hay niños está al 100% de su potencialidad, convirtiendo los hogares en verdaderos centros de creatividad estos días de confinamiento. Pero no hay que olvidar los momentos de concentración y lectura, muy necesarios para fomentar la imaginación. Los cuentos antes de irse a la cama son un clásico al que no se debe renunciar, por mucha actividad que se haya hecho durante el día.
En nuestra mesita de noche, la ardilla de Olivier Tallec se nos ha colado en lo alto de la pila de cuentos. El autor francés habla de posesividad a los niños a partir de 4-5 años en Es mi
árbol (BIRABIRO), y lo hace a través de una ardilla tan preocupada por defender lo que considera que es suyo que no se da cuenta de lo que se pierde. Incluso le da por pensar en levantar un muro, a saber de dónde habrá sacado la idea. Un poco más gamberras son Las
brujas de Ariete (COMBEL), un cuento rimado de Bel Olid y Pep Montserrat que explica la historia de siete brujas que viven en el bosque donde un buen día encuentran un huevo del que nace un monísimo unicornio de ojos brillantes de purpurina; un mimoso animalito que viene a demostrar que parejas antagónicas, con un poco de esfuerzo, pueden llegar a llevarse a las mil maravillas.
Sara y Pelanas y el corazón roto (LOS CUATRO AZULES) del autor e ilustrador alemán Jan Birck es una magnífica lectura para abordar la separación de los padres, un tema espinoso donde los haya pero que Birck trata con inteligencia y una gran dosis de humor. Sara y su inseparable perro Pelanas intentan animar a su madre, que yace en estado catatónico con el corazón roto tras la marcha del padre. Y sí que se anima, sí, quizá demasiado para el gusto de Sara (a partir de 6 años).
Por si alguien no sabe quién es Telma, sólo decirles que hace un par de años dejó a sus fans destrozados, sobre todo a los de 5 años, al desaparecer de los escenarios sin dejar rastro. Pero este fantástico unicornio de color rosa de Aaron Blabey ha vuelto. El título no engaña: El retorno de Telma el unicornio (ANAYA).
Pero esta vez con las cosas muy claras.
Por si alguien intenta eludir y dilatar estos días la rutina de la ducha o el baño,
Lisa Bigg y Paloma Corral (ilustraciones) nos recuerdan con La bañera (TAKATUKA) todo lo divertido que el ritual del baño comporta, y más si se hace con mamá. Desde un astronauta en pleno aterrizaje forzoso, hasta un pirata, pasando por un túnel de lavado, las autoras dan testimonio del gran abanico de escenarios posibles en los que puede convertirse una polifacética bañera.
Seguramente estos días las matemáticas son predominantes en las tareas diarias de los chavales. Ellas son también las protagonistas del cuento de Miguel Tanco Cuenta conmi
go (LIBRE ALBEDRÍO), para prien meros lectores. él, la pequeña narradora nos habla de las aficiones de los miembros de su familia y de ella misma, amante de probar muchas cosas, aunque espeinclinada cialmente por una de ellas: las matemáticas. Unaparticulareinteresanmanera te de observar el mundo. Y también para contar son estas Ovejas, muchas, muchísimas
ovejas (LA CASITA ROJA )de
la japonesa
HALUKA NOHANA. Un enorme rebaño contempla cómo un plumerito se echa a volar en su prado y deciden seguirlo por bosques, mares, laberintos y desiertos.
Voy a portarme muy bien (NUBE
OCHO), del irlandés Chris Haughton, nos viene estos días como ani¿qué llo al dedo. madre o padre no lo ha escuchado al menos cien veces estos días? Simón también se lo dice a Alfonso, su amo. Este tiene que salir y él promete que va a ser el mejor perro del mundo. Pero sus buenas intenciones y sus actos no van a ir siempre de la mano.
Para reflexionar un poco antes de acostarnos, no está de más repasar de dónde venimos (aunque el a dónde vamos no esté tan claro) con la propuesta de los autores Catherine Barr y Steve Williams en Desde los simios hasta
nosotros (SM). Una sucinta historia de la humanidad (a partir de 7-8 años) jocosamente ilustrada por Amy Husband donde podemos vernos reflejados en los primeros humanos, desde el homo erectus hasta el sapiens, desde los primeros agricultores hasta los industriales... Y así hasta nuestros días.
Y como el tiempo apremia, El petit menjatemps (LA GALERA) nos habla del paso de las horas, de los relojes y de la percepción que cada uno tenemos del tiempo. Algo que parece muy sesudo pero que en manos de Llucia Ramis se convierte en algo sencillo. Bellamente ilustrado por Gabriel Salvadó . |