No hay que reutilizar las mascarillas de un solo uso, avisa la OMS
Después de que la semana pasada diversos países, entre ellos España, comenzaran a cambiar de postura y a recomendar a sus ciudadanos el uso de mascarillas quirúrgicas en espacios al aire libre, distanciándose así de las directrices de la Organización Mundial de la Salud (OMS), esta ahora acaba de publicar un nuevo informe en que reafirma que no hay evidencia científica de que llevar una mascarilla, ya sea médica o de otro tipo, puede prevenir la infección por coronavirus en personas sanas.
Aun así, ante el hecho de que cada vez más personas adopten esta medida, la organización alerta de que es crucial que no se reutilicen las de un solo uso y que se desechen correctamente tras utilizarlas, tirándolas en un cubo de basura cerrado, para evitar potenciales contagios.
La OMS recomienda, además, que a medida que las mascarillas se humedezcan al llevarlas, por el aliento y la respiración, se cambien por otra seca, puesto que la humedad es beneficiosa para el patógeno.
Asimismo, insiste en que, para ser efectivas, deben cubrir boca y nariz, minimizando los espacios que quedan entre la cara y la máscara.
Hay que evitar tocarlas mientras se usan y nunca quitárselas estirando de la parte de delante, que es donde podría estar el virus, sino desde las cintas traseras. Tras usarlas, siempre hay que lavarse las manos con agua y jabón, o con etanol al 70%.
La OMS advierte de que usar mascarilla puede conllevar riesgos, como que las personas se sientan falsamente protegidas y descuiden otras medidas clave para evitar el contagio, como el lavado de manos y mantener una distancia social de al menos un metro.
El hecho de que algunos gobiernos hayan empezado a recomendar a sus ciudadanos usar esta protección al salir a la calle tiene que ver con la transmisión del virus por parte de casos asintomáticos. El periodo de incubación de la Covid19 dura de media entre cinco y seis días, aunque puede llegar a ser de 14. Durante ese periodo, las personas contagiadas podrían transmitir el virus.
En este sentido, según un estudio publicado en Nature, las mascarillas podrían ayudar a prevenir esa transmisión, al reducir la cantidad de gotas respiratorias y aerosoles que la persona contagiada expulsa al medio.
La OMS insiste en que, con la información científica disponible, la principal ruta de contagio es el contacto directo con gotas respiratorias de personas enfermas o con superficies contaminadas.
Los expertos recuerdan que es importante quitarse el cubrebocas tirando de la goma trasera