Todos los nuevos vehículos deberán ser de emisiones cero en 20 años
La flota de turismos deberá dejar de emitir CO2 en el 2050 según la ley del clima
La vicepresidenta y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, mantiene su plan. Los nuevos turismos deberán reducir “paulatinamente sus emisiones, de modo que no más tarde del año 2040 sean vehículos con emisiones de 0 gramos de Co2/km” de recorrido. Así lo establece el anteproyecto de ley de Cambio Climático que previsiblemente aprobará el Gobierno el próximo martes. La ley será clara: en 2040 no podrán circular nuevos coches emisores de C02 (gasolina, diésel, gas e híbridos convencionales), y, para ello, “se adoptarán las medidas necesarias”.
La ministra Ribera sufrió fuertes presiones desde diversos sectores desde que se supo su intención de poner fecha de caducidad a los vehículos convencionales de combustión. Pero el último borrador que va al Consejo de Ministros (que ha pasado todos los filtros de consulta de la Administración) mantiene lo esencial de la propuesta inicial.
El documento señala que el conjunto de las administraciones públicas pondrán en marcha medidas que posibiliten en el 2050 un parque de turismos y vehículos comerciales ligeros sin emisiones directas de CO2. Todas las instancias implicadas adoptarán medidas para que los turismos y vehículos comerciales ligeros nuevos no destinados a usos comerciales reduzcan progresivamente
Los municipios de más de 50.000 habitantes deberán contribuir creando zonas de bajas emisiones para el 2023
sus emisiones para que “no más tarde del año 2040” sean vehículos con emisiones de 0gco2/km.
“Somos un Estado miembro de la UE. Es razonable que una ley del Clima de un país comunitario sea coherente con la visión comunitaria sobre este asunto, sobre todo en el contexto de un mercado global, como es el de la automoción”, dicen fuentes que conocen la elaboración del anteproyecto de ley. El texto añade que, previa consulta con el sector, se adoptarán medidas que faciliten la penetración de estos vehículos, incluyendo apoyo a la I+D+I.
El anteproyecto de ley (pendiente de aprobación) establece que los municipios de más de 50.000 habitantes deberán contribuir a la mitigación de las emisiones derivadas de la movilidad, incluyendo la implantación de zonas de bajas emisiones no más tarde del 2023. También deberán incorporar acciones para facilitar los desplazamientos a pie o en bicicleta; y el fomento del uso de la red de transporte público.
El anteproyecto de ley se aprueba cuando el sector del automóvil reclama fuertes ayudas para encarar su futuro y evitar el cierre de fábricas y el desempleo. En este sentido, el diputado de Podemos Juantxo López de Uralde insiste en que las ayudas deben estar condicionadas. “La industria debe contribuir a promover el coche limpio. No se puede seguir subvencionando los coches contaminantes”, recalca.
El texto fija como objetivo que España alcance la neutralidad climática no más tarde del 2050; es decir, que el balance entre las emisiones que se generen y las que se absorban o neutralicen sean de suma 0. Además, antes de mitad de siglo, el sistema eléctrico debe ser 100% renovable. Y en esta senda, en el 2030, las emisiones en España deberán reducirse al menos un 20% respecto al 1990.
Este es un objetivo que encaja con la ambición prometida por la CE (que se plantea lograr una reducción de emisiones de entre el 50% y el 55%para el 2050 respecto a los niveles de 1990).
Al finalizar la próxima década, el 35% del consumo final de la energía deberá ser de origen renovable. Para esa fecha, en el caso concreto del sistema eléctrico, las renovables deberán aportar al menos un 70%.