Infinita paciencia
Aun que siempre hay excepciones, digám os lo ya de una forma clara: los ciudadanos de este país han demostrado tener una infinita paciencia en este largo confinamiento y bien habrá que reconocerlo cuando la des escalada se acabe. Si alguien tiene dudas, que consulte el último estudio del cisque nuestro experto car les castro desmenuza para todos ustedes y que concluye que el 95% de los encuestados creen que las medidas de confinamiento impuestas por el Gobierno son necesarias. Hace un mes, los que se pronunciaban así eran el 97%. Es decir, solo un 2% ha cambiado de opinión.
La encuestare vela también que los ciudadanos están ya muy agotado s por el enclaustra miento forzado y que están en una situación límite, pero aun así son mayoría( el 60%) los que defiende n alargarlo todavía más. encuestas similares de otros institutos de opinión van en la misma línea, lo que significa que el malestar existente en las redes sociales o las manifestaciones que se están produciendo en muchos lugares de España en contra del estado de alarma no son todo lo representativos que algunas formaciones políticas creen.
Los ciudadanos han aguantado estoicamente la rigidez de unas medidas que vulneran la libertad individual de cada persona como es el derecho al amovilidad. y con una letra pequeña capricho saque autorizao prohíbe alguna serie de actividades de una forma más que discutible. Y con directrices cambiantes que despistan hasta al más listo. ¿Puedo ir a comprar a otra localidad pero no a hacer deporte? ¿Tengo fijada una hora de salida para pasear pero después puedo ira comprar a la hora que quiera? Después de nueve semanas de confinamiento aún no sabemos si las mascarillas deben ser obligatorias. Y los guantes,¿ han pasado deprenda básica a ser enemigo público número uno?
Pues bien, en este contexto, el Gobierno parece que va a conseguir hoy en el Congreso de los Diputados otro pequeño milagro que es alargar otros 15 días el estado de alarma. Sería la quinta vez que lo logra a pesar de su debilidad parlamentaria y de una gran oposición dentro y fuera del hemiciclo. Pero el Ejecutivo puede estar tranquilo porque no habrá rebelión. La ciudadanía aguanta y sigue dando una gran lección de responsabilidad para vencer al virus. Vale la pena reconocerlo.