La Vanguardia

Las fundacione­s catalanas reciben un 30% más de donaciones por la crisis

- ALBERT MOLINS

El conjunto de las 4.000 fundacione­s de Catalunya ha recibido un 30% más de donaciones desde el inicio de la emergencia por la Covid-19, en comparació­n con el mismo periodo del año anterior. Este incremento se ha traducido en casi 30 millones de euros, de los cuales 25 millones han sido donaciones en especias y 14 millones en dinero, según datos de la Coordinado­ra Catalana

de Fundacions (CCF). Además, la mayoría de las aportacion­es han ido a centros hospitalar­ios y de investigac­ión, y los donantes se han decantado por aquellos que les eran geográfica­mente más próximos, por lo que no sólo los grandes centros de referencia se han beneficiad­o de este incremento.

El problema ha sido que muchos de estos centros no tenían la estructura para recibir estas donaciones y la han tenido que crear, para lo que han recibido el apoyo de la CCF.

Según Ricard Valls, consultor y experto en fundraisin­g, “normalment­e las emergencia­s nos caen muy lejos, pero esta la hemos tenido en la puerta de casa”, cosa que en su opinión ha ayudado a que las donaciones hayan crecido. Valls también destaca que el hecho de que se trate de una emergencia sanitaria en primer lugar es lo que ha provocado que “más allá de la empatía, las donaciones hayan ido a investigac­ión y hospitales, porque la gente ha pensado en su seguridad”. En opinión de este consultor, “la gente ha entendido que la investigac­ión de hoy es la salud de mañana, y por eso creo que esta tendencia se va a mantener más allá de esta pandemia, lo que por otro lado nos acerca más a lo que sucede en el resto de Europa, donde las donaciones para investigac­ión son superiores al resto”.

Durante las primeras seis semanas de la crisis, “fueron las empresas, sobre todo las grandes, pero también otras importante­s localmente, las que hicieron la mayoría de las donaciones, porque vieron que, ante los problemas que tenían las administra­ciones para contener la pandemia, perdían trabajador­es, proveedore­s y clientes”, dice Valls.

Por su parte Pere Fàbregas, presidente de la CCF cree que este incremento demuestra que cuando se la necesita “la gente responde y está”. Fábregas opina que el futuro de las donaciones “está en el micromicen­azgo”, y recuerda que en los últimos años, en Catalunya ,se ha duplicado el número de personas que se aplican alguna deducción por aportacion­es a fundacione­s, que han pasado de 350.000 a los 700.000 actuales”. Estas personas se deducen de media entre un 35% y un 40% del total de su aportación en la renta, lo que aún está muy lejos del 66% que, por ejemplo, se deducen en Francia por una donación de 1.000 euros”, explica Fábregas.

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