El Hermitage alega contra el veto a la ubicación prevista
El museo recuerda que Bcomú votó a favor en el 2018
Los promotores del nuevo museo Hermitage Barcelona han presentado alegaciones a la negativa del gobierno municipal a la ubicación prevista, en la nueva bocana del puerto, muy cerca del hotel Vela.
En un documento de alegaciones que recoge Europa Press, los promotores hacen hincapié en que el proyecto cumple con todos los requisitos normativos, urbanísticos y administrativos.
Asimismo, recuerdan que la Tercera Modificación del Plan Especial de la Nova Bocana, aprobada el 27 de abril del 2018 con el voto favorable de Bcomú, “prevé el establecimiento del Museo Hermitage en ese emplazamiento”.
A juicio de los alegantes, de no ser así, constituiría una actuación nula de pleno derecho que carece de fundamento jurídico, y que supondría una violación del Derecho de la Unión Europea en cuanto a la libre prestación de servicios y establecimiento. Hermitage Barcelona ha mantenido encuentros con el puerto y con representantes de los grupos municipales del Consistorio excepto Bcomú, del que no ha recibido respuesta.
En los documentos incide en que cualquier arbitrariedad del
Ayuntamiento iría en contra de la potestad de Puerto y el derecho del solicitante de la concesión, y basa la negativa municipal en razones ideológicas.
Subraya que es una “oportunidad” para la ciudad, con una financiación íntegramente privada que permitirá recuperar y dinamizar la economía de la ciudad, con un proyecto cultural y educativo.
El proyecto cuenta con el compromiso expreso del director de The State Hermitage Museum, Mijail Piotrovski, y con una inversión directa de más de 50 millones de euros de capital privado, un impacto económico en el entorno de más de 30 millones de euros anuales y la generación de cerca de 400 puestos de trabajo, entre directos e indirectos, según cálculos de los propios promotores.
Durante los encuentros, se ha destacado la contribución del proyecto al desarrollo del turismo de calidad, a potenciar la oferta cultural y fortalecer los lazos educativos, además de contribuir a la recuperación de la ciudad tras la crisis por el coronavirus.
La Cámara de Barcelona mostró hace unas semanas su apoyo a la construcción del museo por su papel positivo para la economía de la capital catalana.
Los promotores creen que se trata de una “oportunidad” para Barcelona en un momento muy delicado