Reinventar una cafetería en la Vall de Boí

Lola Villar estaba muy satisfecha por su apuesta, una acogedora cafetería que abrió hace un año en Barruera, en la Vall de Boí. “El negocio iba muy bien gracias al turismo de montaña extranjero que valora este tipo de establecimientos, con productos locales, caseros y con las opciones de comida vegana y sin gluten. Además soy la única en la zona que abre a las 7.30, los otros bares lo hacen a las 9. La campaña de Navidad fue muy bien y las perspectivas eran buenas”, relata la propietaria de Lola Coffee&brunch. Pero la Covid ha trastocado el empuje inicial de este local especializado en desayunos, brunchs y meriendas, con tartas, crepes o burritos y café ecológico. Dos meses y medio de parón obligan a replantearse muchas cosas, a ampliar los horarios para captar más público y a ofrecer nuevos productos para poder mantener la persiana abierta. “Tengo que reinventarme. A partir de julio prepararé platos para llevar, además estoy trabajando con guías que hacen travesías con clientes franceses, holandeses, alemanes, israelitas .... a los que ofreceré picnics”, detalla Lola, madre de una niña de tres años que para poder conciliar había optado por cerrar unas horas al mediodía. Los cambios para hacer viable la cafetería pasan por servir también almuerzos y prescindir de momento de más mano de obra. Todo lo prepara Lola, una viajera que se ha asentado en la Vall de Boí, donde su pareja también regenta un restaurante en Erill-la-vall. /

.