UGT ve riesgos en que el ingreso mínimo sea compatible con trabajar
La posibilidad de compaginar ingreso mínimo vital con trabajos por pocas horas puede ocasionar “efectos indeseados”, advirtió ayer UGT. Por ello, el sindicato destacó la necesidad de “extremar la cautela y vigilancia” para evitar que las empresas “aprovechen” para reducir más los salarios o para ofrecer contratos fraudulentos a tiempo parcial.
En un informe publicado ayer, afirmaron que, ante la situación de “elevado desempleo existente, la extrema precariedad del mercado laboral español y la enorme discrecionalidad de la que disponen las empresas para determinar las condiciones de trabajo”, el ingreso mínimo podría acabar derivando en un “instrumento adicional de devaluación salarial”. “Es imprescindible evitar que se convierta en una renta que favorezca el mantenimiento de unos salarios reducidos o su devaluación, por lo que deben introducirse las cautelas precisas en el reglamento de la norma, así como implementarse políticas que combatan de raíz la precariedad”, remarcaron.
La nueva renta mínima de carácter estatal es compatible con el cobro de un salario hasta determinados niveles. Los beneficiarios han de acreditar rentas muy bajas (incluidas salarios), así como superar un test de patrimonio.
De todas maneras, el análisis de UGT subrayó que la aprobación de esta renta mínima es una medida muy relevante, un “primer paso fundamental” para conformar un sistema de protección social con una cobertura de prestaciones no contributivas más amplias.
Sobre el encaje con las ayudas autonómicas de este tipo, el informe apunta que la prestación de la Seguridad Social podría elevar la cuantía mínima en hasta trece territorios, sin perjudicar a los posibles beneficiarios del resto de comunidades, porque se trata de ayudas complementarias. El sindicato que lidera Josep Maria Álvarez pide también mejorar la coordinación entre los distintos niveles administrativos implicados y simplificar los trámites para que llegue a todos los potenciales beneficiarios.
La importancia de contar con la implicación de las autonomías en la gestión del ingreso mínimo es una de las recomendaciones que realizó ayer Fedea. El grupo de expertos destacó también la necesidad de introducir incentivos a la incorporación al mercado de trabajo en la nueva prestación.
El informe de la comisión de medidas de protección a colectivos vulnerables del Grupo de
Fedea pide implicar a las autonomías en la gestión de la nueva prestación de la Seguridad Social
Trabajo Mixto Covid-19, publicado por Fedea, calificó de “acertada” la decisión de introducir el ingreso porque “garantiza un mínimo común por parte del Estado, y da libertad a aquellas comunidades que así lo deseen para que complementen este mínimo garantizado”. Sin embargo, se quejan de que “no hay ningún tipo de obligación por parte de las autonomías para colaborar y estas podrían, si quisieran, retirar estratégicamente sus rentas mínimas para que fueran reemplazadas por el ingreso mínimo estatal”.