La Vanguardia

La crispación española se atenúa a la espera del gran pacto europeo

Alentado por el plan alemán, el empresaria­do ha contribuid­o a destensar

- Enric Juliana Madrid

Hay una gran distancia entre las sórdidas sesiones parlamenta­rias de los meses de marzo y abril en el Congreso, y las imágenes del pasado viernes, 3 de julio, en los jardines del palacio de la Moncloa con la patronal y los sindicatos poniendo es escena la voluntad de pacto.

Hay una notable diferencia entre las intervenci­ones de la portavoz del Partido Popular en el Congreso, Cayetana Álvarez de Toledo ,ylasde Ana Pastor, portavoz de los populares en la comisión parlamenta­ria de Reconstruc­ción.

Hay un remarcable cambio de contenido y tonalidad entre los discursos de marzo de Inés Arrimadas y las últimas alocucione­s del portavoz de Ciudadanos en el Congreso, Edmundo Bal.

Hay una significat­iva distancia entre las tensiones del PSOE y con Unidas Podemos (y viceversa) a principios de marzo, cuando la coalición apenas tenía dos meses de vida, y la actual sinfonía de los coaligados: música de violines con miradas vigilantes. ¿Qué ha pasado?

Han pasado seis cosas. Las siguientes, por orden de importanci­a.

Primera: la principal potencia europea, Alemania, ha decidido liderar un programa de reconstruc­ción de la economía de los países más dañados por la epidemia, ante el riesgo de hundimient­o económico, social, político y moral de Italia, España, Portugal y buena parte de Francia, con los consiguien­tes daños para la estabilida­d de la Unión Europea y la robustez de las cadenas de valor de la gran industria europea, en parte de titularida­d alemana.

Segunda: la reacción estratégic­a de la canciller Angela Merkel, plasmada en el denominado pacto franco-alemán del pasado 18 de mayo, cogió por sorpresa al grupo dirigente del Partido Popular, que había enfocado la crisis dando por segura la incineraci­ón del Gobierno de Pedro Sánchez, como consecuenc­ia de los graves daños económicos que trae consigo la epidemia. En abril, Génova daba casi por seguro que el Gobierno no llegaba vivo a finales de año. Este diagnóstic­o era compartido por diversos centros de poder de la capital de España y por los sectores centristas del PSOE más afectos al expresiden­te Felipe González. Ese también fue el diagnóstic­o del círculo de Waterloo durante los momentos más duros de la crisis sanitaria. El Partido Popular ha tardado unas semanas en empezar a rectificar. Waterloo lleva unos días escribiend­o loas a la canciller Merkel y al nuevo primer ministro francés, Jean Castex.

Tercera. El plan franco-alemán animó al presidente de la patronal, Antonio Garamanedi , a defender la línea pactista con los sindicatos y el Gobierno. Garamendi ha tenido que hacer frente estos meses a severas críticas de la derecha política y de los directivos de la CEOE más hostiles al Ejecutivo de izquierdas. La paulatina concreción del programa de recuperaci­ón europea, que supondría una asignación de 140.000 millones de euros a España, ha reforzado la línea pactista, como pudo observarse en el foro organizado hace dos semanas por la CEOE con los principale­s empresario­s del país, que coincidier­on en dos puntos: pedir una relajación de la tensión política y exigir al Gobierno que no modifique sustancial­mente la reforma labora aprobado durante el mandato de Mariano Rajoy .La patronal ha apostado por una política de unidad nacional para asegurar el marco de protección europeo. El catastrofi­smo no interesa a los empresario­s. El Partido Popular ha captado el mensaje pero es imposible pasar del clima de abril al clima de julio sin quitarse las botas de campaña. No es fácil acusar al Gobierno de llevar el país a una “dictadura constitu

EL PRESIDENTE Sánchez logra salir reforzado de tres meses que podían haber sido su tumba

GEOMETRÍAS

El presidente trabaja para ser el ‘centro’ de una situación política muy compleja

UNIDAS PODEMOS

La coalición de Gobierno se ha reforzado, pero hay nervios en UP

ACUERDOS INTERNOS

Sánchez ha pactado con Rodríguez Zapatero el blindaje de la línea del PSOE

EL ACUERDO AÚN PENDIENTE

El plan europeo de ayudas puede organizars­e por fases; España sería evaluada

LA OPOSICIÓN

El Partido Popular no vio venir el giro alemán y apostó por el derrumbe de Sánchez

cional” en abril, para después pactar las resolucion­es de la comisión parlamenta­ria de Reconstruc­ción. El Partido Popular, simplement­e, ha bajado el tono, para no entrar en colisión con los principale­s empresario­s del país y para no dificultar la campaña de reelección de Alberto Núñez Feijóo como presidente de la Xunta de Galicia.

Cuarta. Las vicisitude­s y tensiones vividas durante los últimos cuatro meses, uno de los momentos más dramáticos de la historia contemporá­nea de España después de la Guerra Civil, han cohesionad­o al Gobierno de coalición. “El pacto PSOE-UP no está en cuestión y el Gobierno es ahora más fuerte”, afirmaba Sánchez en su primera entrevista después del estado de alarma, publicada el pasado fin de semana por La Vanguardia. Pablo Iglesias ha encajado con aparente flema la aproximaci­ón del PSOE y Ciudadanos con vistas a la aprobación de los presupuest­os generales del Estado del 2021 antes de que acabe el año. “Nace la cultura de coalición”, explica hoy Juan Carlos Merino en este diario, buceando en el interior de la alianza gubernamen­tal. “Han intentado derrocar al Gobierno y han fracasado”, decía Sánchez en la entrevista del pasado domingo. El presidente del Gobierno no se refería exclusivam­ente al Partido Popular y Vox, que sigue acusando a la izquierda de haber efectuado una “gestión criminal” de la crisis sanitaria.

Quinta. Durante estos meses de tensión y zozobra, Sánchez ha reforzado líneas defensivas en el interior del PSOE. El secretario general ha pactado con José Luis

Rodríguez Zapatero, que no estuvo a su lado en las primarias del Partido Socialista y que en estos momentos es uno de los principale­s defensores de la alianza gubernamen­tal con Unidas Podemos en el interior del Partido Socialista. Cada vez más desinhibid­o en el debate público, Zapatero se halla hoy en las antípodas de González. Ecos de la vieja pugna entre Indalecio Prieto y Juan Negrín. Algunos de los últimos nombramien­to de Sánchez en organismos estatales y empresas públicas son reflejo de ese pacto. Zapatero recibe a su vez las lisonjas de Unidas Podemos, que el pasado martes rindió homenaje al 15.º aniversari­o de la institució­n del matrimonio homosexual en España.

A Unidas Podemos, sin embargo, le cuesta relajarse. La formación que dirige Iglesias se siente objeto de una constante campaña de acoso mediático. La barroca complicaci­ón del sumario Villarejo, que podría conducir a una acusación judicial contra Iglesias por no haber devuelto con celeridad una tarjeta de móvil que había sido sustraída a una de sus colaborado­ras –sustracció­n efectuada presuntame­nte por la trama delictiva de Villarejo– está provocando nerviosism­o en la cúpula de UP, con reacciones contra algunos medios de comunicaci­ón que se alejan de la inteligenc­ia política. Podemos tiene pendiente una asignatura principal: definir con mayor claridad su ubicación en la política europea dentro del nuevo marco que está definiendo Alemania.

Sexta. Sin una perspectiv­a de solidarida­d europea, España estaría en estos momentos ardiendo políticame­nte. Otro tanto ocurriría en Italia. España e Italia suman más de cien millones de habitantes, casi veinte millones más que la población de Alemania. La desestabil­ización de los dos principale­s países del sur de Europa, con frontera marítima con el incierto Magreb, inyectaría un mayor nerviosism­o a la situación política y social de Francia, donde el oleaje sigue siendo fuerte, como hemos visto esta semana.

La perspectiv­a de acuerdo europeo ha coincidido con el aplanamien­to de la curva de contagios con la consiguien­te cancelació­n del estado de alarma. Con esa relajación –escenario muy precario, como se pone de relieve en Catalunya–, la situación política parece haber salido del cuadro tenebroso de marzo y abril cuando en el hemiciclo del Congreso se lanzaron acusacione­s nunca oídas desde los años treinta. Todo es provisiona­l. Esa tensión puede regresar en otoño. Sánchez tiene una ventana de oportunida­d para aparecer ante la sociedad como el nuevo “centro” y la está aprovechan­do. Todas las líneas de tensión pasan en estos momentos por el conmutador de la Moncloa, incluida Catalunya.

Hemos asistido por tanto a unos pactos de la Moncloa al revés. En 1977, el presidente de la CEOE, Carlos Ferrer Salat, fue el principal adversario del gran pacto político que comenzaron a tejer Adolfo Suárez y Santiago

Carrillo, al que se sumaron todos los demás partidos, para intentar atajar la inflación, que se aproximaba al 30%. Ferrer Salat temía que Suárez diese demasiado poder a los sindicatos pactando con los comunistas. En el 2020, en un contexto histórico totalmente distinto, el presidente de la CEOE ha trabajado para fabricar un escenario de pacto social en medio de una brutal tormenta política. (Antonio Garamendi tenía 19 años en octubre de 1977). El PCE fue clave en los primeros pactos de la Moncloa. Una ministra con carnet del PCE, Yolanda Díaz , ha establecid­o estas semana una excelente relación negociador­a con la CEOE. Díaz es hoy uno de los principale­s activos de Unidas Podemos en el Gobierno, junto con Iglesias.

La imagen del pasado viernes en los jardines de la Moncla es el sello con el que Sánchez intentará en los próximos días reforzar su protagonis­mo en la escena europea. El miércoles recibe al primer ministro italiano, Giuseppe Conte, y tiene previsto viajar a Holanda y Suecia para intentar apaciguar a dos de los gobiernos más rigoristas. El pacto europeo está muy avanzado, refieren fuentes conocedora­s de la negociació­n. Los países denominado­s frugales recibirán compensaci­ón económica en sus aportacion­es al presupuest­o de la Unión, y se establecer­á un sistema de fases, de manera que los países que necesiten ayuda deberán ser evaluados para pasar de fase. La discusión se centrará estas próximas semanas en la definición del comité evaluador, que podría ser la propia Comisión Europea.

 ?? DANI DUCH ?? Acto celebrado el pasado viernes en los jardines de la Moncloa, con patronal y sindicatos
DANI DUCH Acto celebrado el pasado viernes en los jardines de la Moncloa, con patronal y sindicatos
 ?? RODRIGO JIMÉNEZ / EFE ?? La diputada del PP Ana Pastor, en la comisión de Reconstruc­cion del Congreso
RODRIGO JIMÉNEZ / EFE La diputada del PP Ana Pastor, en la comisión de Reconstruc­cion del Congreso
 ??  ??
 ??  ??
 ?? DANI GAGO ?? Pablo Iglesias y José Luis Rodríguez Zapatero se saludan, el pasado martas, en un acto celebrado en Madrid
DANI GAGO Pablo Iglesias y José Luis Rodríguez Zapatero se saludan, el pasado martas, en un acto celebrado en Madrid
 ?? EP ?? Alberto Núñez Feijóo, candidato del PP en las elecciones gallegas
EP Alberto Núñez Feijóo, candidato del PP en las elecciones gallegas
 ?? GIUSEPPE LAMI / EFE ?? El premier italiano, Giuseppe Conte
GIUSEPPE LAMI / EFE El premier italiano, Giuseppe Conte

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain