El poco diálogo de Colau sobre vivienda crispa a la oposición
El gobierno desconvoca en el último momento la presentación de un decálogo después de la queja de los grupos por no poder participar
A una semana del pleno que ha de dar luz verde a la modificación del actual presupuesto a través de la creación de un fondo Covid, y cuando ya se ultima el acuerdo para la reconstrucción de la ciudad, el llamado Pacto por Barcelona, las formas del gobierno sociocomún en materia de vivienda irritan a la oposición. Un desencuentro que para evitar ir a mayores obligó ayer a la alcaldesa Ada Colau a suspender un acto con entidades para presentar un decálogo sobre el acceso de vivienda. La razón oficial: hay que seguir trabajando. La real: el enfado del conjunto de la oposición.
Todo explotó en la comisión de Derechos Sociales de la mañana. Una comparecencia de la concejal de Vivienda, Lucía Martín, para dar cuenta del plan municipal de alquiler pisos turísticos, se convirtió en un agrio reguero de reproches por el acto, que se tenía que celebrar por la tarde en el Saló de Cent y que iba a ser una puesta de largo de las políticas de viviendas de Colau arropada por entidades afines.
“Nos enteramos de las medidas por la prensa. Así no podremos llegar nunca a un pacto de vivienda”, lamentó la concejal de Ciudadanos, Marilén Barceló. “Han cerrado un decálogo para los próximos años en el que no nos han dejado participar”, lamentó el portavoz de los populares, Oscar Ramirez. “El viernes por la tarde nos mandan un documento ya hecho y se nos invita a participar si estamos de acuerdo. Y es a la misma hora que se celebra la comisión de Urbanismo”, se quejó la edil de Barcelona pel Canvi, Eva Parera. “Las políticas de vivienda sin un consenso amplio están condenadas al fracaso o solo son propaganda”, advirtió la portavoz de Jxcat, Neus Munté. El desencuentro de ayer se produjo, además, después de que el lunes PP, Cs y Barcelona pel Canvi abandonaran la comisión de regulación de los precios de alquiler “ante los reiterados incumplimientos y la falta de diálogo del gobierno municipal”.
Lucía Martín, en su respuesta, cargó airada contra la oposición, de la que dijo que había tenido tiempo de participar. “Eso es poca mano
Las formaciones aseguran que recibieron el documento el viernes por la tarde
izquierda”, apuntó la concejal de ERC, Eva Baró.
Al cabo de una hora se produjo la rectificación. El acto de presentación del decálogo se transformó en una sesión “más de trabajo”, en la que se esperaba la participación de la oposición municipal “para buscar consensos”.