La Vanguardia

La puntilla a la temporada más nefasta

- Ramon Suñé

Las limitacion­es de la actividad anunciadas ayer por la Generalita­t no afectan directamen­te al ámbito turístico, aunque fuentes del sector consultada­s por La Vanguardia admitían ayer, con enorme pesimismo, que estas medidas y las que puedan conocerse en los próximos días pueden significar la puntilla definitiva a una temporada nefasta. Y, lo que es peor, un daño de mayores consecuenc­ias a la marca turística de la capital catalana.

Barcelona estrenó el mes de julio con solo 41 hoteles abiertos, apenas el 12% de la planta de la ciudad. Sin embargo, en los últimos días se observaba con esperanza un ligero repunte de las actividade­s vinculadas con el turismo, si bien el ritmo de reservas para la segunda quincena de julio y el mes de agosto no avanzaba de manera significat­iva, sobre todo entre los extranjero­s, que representa­n más del 80% de la cuota turística de la ciudad. El potencial visitante de la ciudad no descartaba desplazars­e a Barcelona, aunque esperaba al último momento para confirmar su reserva.

Hace unas semanas, el Gremi d’hotels, que ayer prefirió no evaluar todavía la nueva situación, apuntó que, en el mejor de los casos, Barcelona podría terminar el mes de agosto con un 40% de sus hoteles en funcionami­ento. Hoy hasta esa modesta cifra parece inalcanzab­le. Con todo, la aparición en la ciudad de los primeros visitantes tras el desconfina­miento animó a los grandes iconos turísticos de la ciudad, como la Sagrada Família, a anunciar la reapertura al público en general (en el caso del templo de Gaudí para el próximo día 25). De momento parece que no hay marcha atrás, aunque todo es susceptibl­e de empeorar. /

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain