La Mesa denuncia el espionaje a Torrent
La Mesa del Parlament acordó ayer en una cita telemática presentar una denuncia penal por el presunto espionaje a los móviles del presidente de la institución, Roger Torrent, y del diputado Ernest Maragall. Se aprobó con los votos a favor de Jxcat, ERC y el PSC y la abstención de Cs.
El texto remitido a los tribunales se basa en las informaciones periodísticas de The Guardian y El País y en la investigación del Citizen Lab de la Universidad de Toronto. Al tratarse del móvil de trabajo de ambos diputados, con los sistemas internos de la institución, se resalta en la denuncia que la Cámara catalana se “ha visto directamente violentada por los hechos denunciados”. La presidencia del Parlament considera además que se ha “comprometido” la seguridad de las comunicaciones de la institución” y que también se habría “vulnerado el derecho a la intimidad de terceras personas, entre los cuales hay diputados”.
La denuncia subraya la condición de aforados de los dos dirigentes republicanos y el hecho de que no haya ninguna investigación en marcha contra ellos en el Tribunal Superior de Justícia de Catalunya o del Tribunal Supremo, los órganos competentes.
A esta denuncia se sumará la anunciada querella que presentarán Torrent y Maragall contra el exdirector del CNI Félix Sanz Roldán por el mismo motivo.
Whatsapp se puso en contacto con Torrent hace unos días para confirmarle que su teléfono había sufrido un intento de intrusión y que guarda los registros de este. Y le ofrecía, desde su sede europea, en Irlanda, su colaboración. De todos modos, la compañía, que es propiedad de Facebook, no puede acreditar si el ataque fue efectivo o no. Eso solo se puede determinar mediante un examen forense exhaustivo del móvil atacado, y el político republicano ya no lo tiene, según las fuentes consultadas.