Avalancha de críticas al carnet Covid que propone el Gobierno de Ayuso
La propuesta de la Comunidad de Madrid de facilitar a los ciudadanos una cartilla Covid fue recibida ayer con una avalancha de críticas por parte de médicos, científicos, consumidores y el ministerio de Sanidad.
Según la propuesta del Gobierno de Isabel Díaz Ayuso, la cartilla Covid será similar a un carnet de vacunación e indicará si un ciudadano ha tenido anticuerpos contra el virus de la Covid o se ha realizado una prueba de PCR. El objetivo es “evitar confinamientos” y que estas personas puedan acceder a gimnasios, museos, cines o a cualquier recinto cerrado y puedan “seguir su vida normal”, dijo ayer Díaz Ayuso en rueda de prensa.
Sin embargo, este tipo de certificado ha sido rechazado por la Organización Mundial de la Salud y por la comunidad científica por ineficaz y discriminatorio.
El ministro de Sanidad, Salvador Illa, declaró ayer que “nosotros [el Gobierno] no recogemos esto en ninguno de nuestros documentos ni ningún organismo internacional apoya una medida de este tipo. Más claro no puedo ser”.
La Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública (ADSP) calificó la propuesta de “idea extravagante”. En la misma línea, la asociación de consumidores Facua denunció que es una medida “sin ninguna base científica que podría vulnerar, entre otras, la normativa de protección de datos”.
Según Facua, si se establece como requisito mostrar la cartilla para acceder a establecimientos o utilizar servicios, “revelaría información relativa a la salud del usuario, que se consideran datos especialmente protegidos”. Además, supondría una “discriminación directa de los ciudadanos y una posible vulneración de sus derechos a la privacidad, a la libertad de movimiento, o incluso al trabajo”.
Estos argumentos fueron desarrollados por el Grupo de Trabajo Multidisciplinar (GTM) que asesora al Gobierno central sobre Covid y que incluye a científicos y especialistas en bioética. Un informe del GTM sobre pasaportes inmunitarios –equivalentes a la cartilla Covid que propone la Comunidad de Madrid– advierte que los tests de anticuerpos no demuestran que una persona tiene inmunidad efectiva contra el coronavirus. “Creyendo falsamente que no pueden contraer o transmitir el virus, los falsos positivos pueden tener un comportamiento descuidado, o incluso temerario, que facilite nuevos contagios”, advierte el GTM.
Preocupa especialmente que, al
alentar la discriminación, una cartilla Covid induzca a algunas personas a resultar infectadas para, de este modo, certificar que tienen anticuerpos y acceder a los beneficios que otorgue el certificado.
La cartilla Covid “tiene más riesgos que beneficios”, declaró ayer a la agencia Efe José María Molero, experto en enfermedades infecciosas de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria. Los riesgos, señaló, incluyen una “falsa sensación de seguridad”, problemas de “índole ética y moral”, e incluso legales, “al diferenciar la equidad en función de que se tenga o no anticuerpos”.