Barcelona acelera las mejoras de los entornos escolares
Durante este mes y el que viene se llevarán a cabo actuaciones en el entorno de las escuelas L’estel, Doctor Ferran i Clua, L’univers, Sagrada Família-sardenya, Pia Balmes y Poeta Foix, así como en las guarderías Manigua y Petit Univers y el instituto L’alzina. Nueve centros escolares que son las actuaciones más inmediatas contempladas dentro del proyecto Protegim les escoles del Ayuntamiento de Barcelona, que busca “pacificar” las inmediaciones de los equipamientos educativos de la ciudad y que el Consistorio acelera de aquí a finales de año. Pretende cerrar el 2020 con 22 actuaciones, cuando en enero la previsión era llevar a cabo 20.
“Esta es una de las políticas más importantes de este mandato”, aseguró ayer la alcaldesa Ada Colau, que junto a la teniente de alcalde de Urbanismo, Janet Sanz, presentó las actuaciones previstas de una iniciativa que se basa en la idea de que las inmediaciones de los centros educativos de la ciudad han de ser lo más parecido a una plaza, en donde el tráfico sea prácticamente inexistente (se reduce el máximo al que se puede circular a los 20 kilómetros por hora), y en donde poder jugar o merendar con total tranquilidad.
Según explicaron Colau y Sanz, cuando se acaben las nueve obras previstas para el verano, en octubre se actuará en otras once. Serán, en este caso, las escuelas 9 Graons, Carlit, Xirinacs, Sagrat Cor-ribes, Mas Casanovas, de les Aigües, Pia Sant Antoni y Rubén Darío; los centros educativos Marillac y Escolàpies Llúria y el instituto Teresa Pàmies.
Una lista de intervenciones que se sumarán a las dos que ya se han desarrollado, la escuela Grèvol –que fue donde se presentó la iniciativa en enero, donde en octubre del año pasado murió atropellado un menor al salir del centro– y el instituto Viladomat. Del total de 22 centros para este año, la gran mayoría se encuentran en el Eixample, donde también se han desarrollado los llamados ecochaflanes. Según explicó Sanz, es así porque es una de las zonas de la ciudad donde hay más tráfico y también más contaminación.
Las actuaciones previstas para este año supondrán una inversión de 1,3 millones de euros. Según datos municipales, las obras beneficiarán a 8.484 alumnos y supondrá “recuperar” 4.352 metros cuadrados de asfalto, cinco calles priorizadas para el peatón, 37 nuevos espacios de juego “espontáneo” y más mobiliario urbano.
“Esta pandemia nos ha reafirmado la necesidad de acelerar la transformación de la ciudad, que no tiene marcha atrás. Tenemos una ciudad en la que podemos identificar que hay un aparcamiento gracias a una señal, pero que no nos avisa de que nos acercamos a una escuela”, manifestó la alcaldesa Colau.
En este sentido, el año que viene está ya prevista la actuación en otros 50 centros escolares de toda la ciudad cuyo proyecto ya está
El Ayuntamiento prevé nueve actuaciones durante este verano y otras once más en el mes de octubre, sobre todo en el Eixample
En el 2021 se espera actuar en otras 50 escuelas y que el total al final de mandato supere las 200
acabado. Si bien la previsión con la que trabaja el Ayuntamiento es que en el 2023, cuando acabe en mandato, se haya “pacificado” las inmediaciones de más de 200 centros de toda la ciudad. “Uno de cada tres”, apuntó Janet Sanz.
Pero también durante el año que viene, según añadieron fuentes municipales, se actuará de forma coordinada con los distritos en todos los entornos educativos de la ciudad –que son un total de 585– para, como mínimo, señalizar de forma visible a los conductores que están cerca de una escuela, para que aumenten la atención y reduzcan la velocidad.