Una campaña oficial recomienda usar mascarillas reutilizables
El usar y tirar pasa factura. Por eso, los ministerios para la Transición Ecológica y el de Consumo han puesto en marcha una campaña para contrarrestar y prevenir el impacto que está teniendo el abandono indiscriminado de mascarillas de un solo uso en la vía pública y los espacios naturales, así como para recomendar la utilización de protecciones reutilizables homologadas. Esta fórmula reduce los daños ambientales de las opciones desechables. El Gobierno promueve esta iniciativa para sensibilizar a los ciudadanos sobre los efectos del abandono de estos materiales plásticos. Recuerda que las mascarillas deben depositarse en la fracción resto domiciliaria –el contenedor gris de residuos no separables–.
Ante el riesgo de degradación de los espacios públicos y enclaves naturales, la campaña apela al “consumo responsable”; y recuerda que, frente a las mascarillas higiénicas y quirúrgicas de un solo uso, es recomendable, cuando sea posible, adquirir las reutilizables –especificación UNE 0065–, que permiten reducir la cantidad de residuos generados.
La importación y fabricación masiva de mascarillas de un solo uso y su mala utilización ya está teniendo efectos indeseados que ahora se pretende atajar. Las compras urgentes valoraron la necesidad de las protecciones, pero no los perjuicios que iban a causar.
Una mascarilla higiénica común, abandonada en un entorno natural, puede tardar en degradarse entre 300 y 400 años, dicen los promotores de la campaña. El objetivo es, por un lado, recordar la necesidad de hacer uso de mascarillas en las salidas al campo, al bosque o a la playa; y, por otro, alertar sobre el impacto de su abandono u olvido en entornos naturales. Recuerdos inolvidables. La mascarilla es para ti, no para la naturaleza es el eslogan.
La campaña se desarrollará durante el periodo estival, pero tendrá continuidad durante todo el año.