Alivio tras el ‘mazazo’
Menorca vive un agosto diferente tras el “mazazo”, según palabras del Rey, que ha supuesto la crisis económica, derivada de la sanitaria. Como tantas otras zonas que durante años se han quejado de la masificación turística, ahora echa a faltar las visitas. Los Reyes viajaron ayer desde Mallorca para poner el foco en la isla como destino vacacional y también para reconocer el esfuerzo del sector primario que ha garantizado el abastecimiento a la población durante la época más dura de la pandemia.
El viaje, como las visitas que los Reyes están haciendo desde que llegaron a Mallorca el pasado día 7, cinco días después de la marcha del rey Juan Carlos, supuso también una nueva inyección de ánimo al Rey. En sus paradas en Alaior y en Ciutadella, los grupos de personas que se concentraron para esperarlos lo hicieron para expresarles su apoyo. Un turista puso el Himno de Riego en su móvil mientras los Reyes bajaban por las escaleras que, desde la plaza del Born, conducen al puerto de Ciutadella, tras visitar en las cercanías de la localidad la Naveta des Tudons, el monumento funerario colectivo más emblemático de la cultura talayótica de Menorca, que fue levantado hace treinta siglos.
Los Reyes, esta vez sin sus hijas, volaron de Marivent a Maó en helicóptero y de allí, en coche, llegaron a Alaior, donde se encuentra Coinga, la factoría de elaboración de quesos que ya visitaron en el 2005 como príncipes de Asturias. En esta ocasión, la cooperativa sirvió de escenario para conocer de primera mano los problemas del sector primario, que ha tenido que hacer grandes esfuerzos para mantener la producción y la distribución durante la pandemia. En la reunión con los directivos de las cooperativas y con los responsables de las diferentes denominaciones de origen, el rey Felipe VI expresó su reconocimiento por el esfuerzo, ante el “mazazo” que ha supuesto la crisis sanitaria y sus consecuencias económicas.
Los Reyes visitaron distintas zonas de producción de la fábrica Coinga como las salas de amasado, cuajado, oreo, secado y empaquetado y participaron en una cata de productos lácteos de Menorca, entre ellos el nuevo queso que lleva el nombre de Isla del Rey. También mantuvieron un pequeño encuentro con los trabajadores, con quienes se fotografiaron en las escaleras de la entrada principal de la fábrica.
Tras visitar la Naveta des Tudons, los Reyes se dirigieron al puerto de Ciutadella, donde compartieron una comida con la presidenta del Govern balear, Francina Armengol; el ministro del Interior, Fernando Grande-marlaska; la delegada del Gobierno, Aina Calvo; la presidenta del Consell de Menorca y los alcaldes de Maó, Alaior i Ciutadella. Todos tomaron el menú degustación de 49 euros en el que no faltaron la caldereta de pescado, croquetas de sobrasada y mejillones de Maó.
En Palma, anoche, cientos de personas convocadas por distintas asociaciones monárquicas dieron su apoyo a Felipe VI en una manifestación que terminó en el palacio de la Almudaina con la lectura de un manifiesto y en la que acudieron líderes de PP, Vox y Cs, informa Nekane Domblás.
Felipe y Letizia visitan una cooperativa de quesos y un monumento de la cultura talayótica