La ‘manta’ tira de Sitges
La venta ilegal tensa la relación entre entidades económicas y Consistorio
El top manta en Sitges, con días con hasta más de un centenar de vendedores, se ha convertido en uno de los problemas del verano, junto con la falta de arena en las playas y las viviendas turísticas ilegales. De hecho, han sido estos los puntos principales que han motivado que las tres principales asociaciones económicas del municipio hayan dejado solo al Ayuntamiento, abandonando el plan local de recuperación económica a raíz de la Covid-19. Esto ha provocado que el Consistorio se haya visto presionado y obligado a mover ficha.
Sitges Comerç ha comenzado a reunirse con el Ayuntamiento para construir el enésimo plan integral que busca erradicar el top manta . El plan quiere poner énfasis en instar a las administraciones superiores a que pongan remedios, a multar a los compradores, velar para evitar la ocupación ilegal de la vía pública sin medidas sanitarias e intervenir desde las vertientes social y policial. A raíz de las críticas se han intensificado los controles policiales.
El presidente de la asociación de comerciantes, Carlos Prieto Marcos, afirma que la alcaldesa Aurosa Carbonell, con sus declaraciones, ha favorecido un efecto llamada de los manteros. Añade que hasta ahora no les habían hecho caso porque no estaban asociados, y que eran “un cero a la izquierda”. También manifiesta que Carbonell y dos de sus concejales se han reunido con manteros para contarles que en Sitges los ánimos están encendidos con el top manta y les han pedido que, como mínimo, lleven mascarillas y utilicen gel hidroalcohólico. En julio se han llegado a contabilizar 115 manteros en Sitges.
La jefa de la oposición, Mónica Gallardo, dice que el top manta es un problema que trasciende Sitges, pero que, “a pesar de todo, ahora estamos en una situación más compleja que nunca porque en el gobierno municipal hay divergencia de opiniones sobre cómo abordar este tema”.
La alcaldesa explica que están preparando “un plan de actuación integral que aglutine acciones sociales y policiales, entendiendo que es una situación que hay que abordar desde esta doble vertiente”.