El juez señala a Fernández Díaz y Cospedal por el caso Bárcenas
El instructor avala la existencia de una operación parapolicial
El juez del caso Villarejo apunta al exministro Jorge Fernández Díaz y la ex secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, por el espionaje al extesorero del PP, Luis Bárcenas.
El caso Villarejo vuelve a dar otro giro inesperado. El juez ha reactivado la pieza conocida como operación Kitchen después de que la Fiscalía Anticorrupción haya pedido actuar contra la ex secretaria general del PP María Dolores de Cospedal y el exministro del Interior Jorge Fernández Díaz por haber participado presuntamente en una operación “parapolicial” para robar documentación al extesorero del PP Luis Bárcenas, quien durante años gestionó las cuentas del partido y se había convertido en uno de los principales enemigos del entonces presidente del Gobierno Mariano Rajoy.
La Fiscalía tiene indicios de que Cospedal tendría algún tipo de “interés personal” en la operación para sustraer documentación a Bárcenas porque se podría ver ella afectada así como otros dirigentes de la formación. Además, el ministerio público se hace eco de una serie de actas notariales del ex número dos de Interior en la época de Jorge Fernández Díaz con las instrucciones que habría recibido sobre cómo llevar el operativo. Por eso, y otros indicios como conversaciones y grabaciones, los fiscales determinan que hay “numerosos y concluyentes” indicios contra el exministro del Interior. Antes de decidir si atiende a la petición del ministerio público, el instructor de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón ha dado el primer paso y ha levantado el secreto de sumario. Lo hizo este lunes a través de un auto en el que apuntaba a directivos de la administración general del Estado o responsales de órganos superiores como las personas encargadas de orquestar una operación “parapolicial” para sustraer información sensible a Bárcenas, que podría afectar a dirigentes de la formación.
En la causa ya se encuentra investigado el exsecretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, número dos de Interior en la época de Fernández Díaz, entre otros. Según el juez, esta operación se habría desarrollado entre los años 2013 y 2015 cuando Mariano Rajoy ostentaba el cargo de presidente del Gobierno y presidente del PP. El juez investiga si se ordenó a un grupo dirigido por mandos policiales que sustrajeran datos a Bárcenas, quien había sido declarado ‘enemigo público número 1’ del PP después de que se conociera la supuesta contabilidad paralela del partido y que el propio tesorero había reconocido en sede judicial. Según el instructor, esta misión fue encomendada al comisario Enrique García Castaño, entonces jefe de la unidad central de apoyo operativo (UCAO), y al excomisario José Manuel Villarejo, encarcelado desde noviembre de 2017. De hecho, esta operación secreta fue descubierta por los investigadores a raíz de la causa contra Villarejo. En el registro de sus domicilios se encontró una serie de documentos que apuntaban a este operativo.
Concretamente, se encontró un pagaré destinado a Sergio Rios, el chófer de Bárcenas, a quien supuestamente se habría pagado con fondos reservados para que se acercara al matrimonio compuesto por el extesorero del PP y su mujer Rosalía Iglesias, ambos condenados por la trama Gürtel.
Según la resolución por la que el juez levanta el secreto de sumario, el encargo que se habría llevado a efecto al menos entre los años 2013 y 2015 consistiría en la captación y la manipulación como colaborador-informante de la Policía de Sergio Ríos Esgueva, conductor de Rosalía Iglesias. “El objetivo de dicha misión -añade- podría ser, aparentemente, la obtención por medio de dicho colaborador, en cuanto persona de la máxima confianza del matrimonio, de información concreta sobre el lugar en el que Luis Bárcenas y su esposa ocultarían material documental comprometedor”, indica el juez.
La Fiscalía cree que Cospedal podía tener “interés personal” en la operación contra el extesorero del PP