Molins de Rei rescata un palacio para dedicarlo al Renacimiento
La antigua casa de la familia Requesens será el primer centro de arte y cultura de este periodo de Catalunya
El palacio de los Requesens es un edificio medieval alzado en el siglo XV catalogado como bien cultural de interés nacional (BCIN) por la Generalitat de Catalunya situado en el centro de Molins de Rei. Hace años que el Ayuntamiento de esta localidad inició la rehabilitación de algunos de sus elementos, pero no se tenía un rumbo claro sobre el palacio en su conjunto. Ahora el Consistorio está arrancando un ambicioso proyecto que trata de dotar a la emblemática edificación de un futuro a la altura de su pasado: quiere que acoja el primer centro de arte y cultura dedicado a la época del Renacimiento en Catalunya.
Varias vertientes explican la importancia histórica del palacio. “Los Requesens fueron una de las familias más leales al rey de la Corona de Aragón, ostentando el cargo de gobernadores generales durante tres reinados”, asegura Àngel Casals, profesor de historia de la Universitat de Barcelona (UB). Fue el epicentro del poder de una parte de lo que ahora son el Baix Llobregat y el Vallès Occidental. Bien conectados con el poder, los
Requesens recibieron visitas muy importantes. “Los reyes pasaban épocas en Molins de Rei porque Collserola era un lugar de caza de jabalíes”, cuenta Casals.
Fue un enclave predilecto para la realeza pero no solo como espacio de descanso y recreo. “Allí se realizó la llegada oficial de los embajadores para declarar a Carlos V como emperador del sacro imperio romano germánico. El acto de proclamación y aceptación se hizo en Molins de Rei. Huyó de Barcelona por los brotes de peste”, rememora el historiador.
Del palacio original queda “más bien poco”. A lo largo de los siglos ha sufrido muchas intervenciones. Lo que más recuerda a su primer aspecto es la capilla. “Es el punto que nos permite ver la dimensión real del palacio”, cuenta el arquitecto municipal, Josep Abulí. Hace no tanto que el edificio era un centro de trabajo de Fecsa y su patio un simple aparcamiento de coches.
Pero ahora se quiere aprovechar toda su historia para crear un “centro de arte i cultura sobre el Renacimiento, único en el país, que ponga en valor el patrimonio histórico dotándolo de contenidos culturales”, define el alcalde, Xavi Paz. Se trata de un viaje por esta época en toda Catalunya. “También se hablará de la historia del pueblo. No es solo una recuperación de un monumento, también se explicará su evolución”, explica la directora del museo municipal, Maria Eugènia Ripoll. “Con la excusa de Carlos V y los Requesens llenará un vacío importante sobre el Renacimiento en Catalunya”, considera Àngel Casals. “Este vacío viene por una cierta visión histórica de Catalunya. pero ahora sabemos que el Renacimiento también fue importante”, agrega. “Tortosa es el único lugar que dispone de algo similar, pero está muy lejos de Barcelona”, sentencia el profesor de historia de la UB.
El proyecto de rehabilitación y puesta en marcha de este centro de arte y cultura asciende a un total 3,5 millones de euros. El Ayuntamiento ha conseguido apoyo de instituciones europeas en forma de 960.000 euros de fondos Feder. “Se llevará a cabo antes del final de este mandato”, sostiene Xavi Paz.
De esta manera se completaría la recuperación del palacio, que arrancó hace décadas con la adquisición del edificio gracias a una permuta con Fecsa cuando se construyó el polígono El Pla. Después, en el 2011, se continuó con la recuperación del antiguo espacio de entrada de los carruajes, que se convirtió en La Gòtica, una sala de actos que recuerda que el edificio tiene reminiscencias góticas. Ya en el 2014 se inauguró la plaza del Palau, que convirtió lo que antes era un aparcamiento de zona azul en una zona verde que oxigena el centro de Molins de Rei y en la que emergen varios negocios relacionados con la restauración. “La plaza recuperó el conocimiento de los vecinos sobre el palacio”, considera Paz. Ya el año pasado se restauró la fachada del edificio que precisamente da a esta plaza, la cubierta y la estructura.
El equipamiento estará dotado de obras renacentistas. Tendrá contenidos fijos y temporales. En este sentido, el Ayuntamiento está trabajando en colaboraciones con varias instituciones como el MNAC, el Muhba, el museo Marès o el museo Tèxtil de Terrassa. Algunas de estas conversaciones están avanzadas y otras no tanto. “Lo intentaremos también con el Prado”, avanza Paz. También se busca la complicidad de particulares como el coleccionista Antoni Gelonch para sumar más contenidos.
La llegada de los Requesens marcó un antes y un después en el pueblo. Apostaron por explotar los recursos económicos de la zona y Molins de Rei pasó de ser una villa que exclusivamente vivía de sus molinos –por eso el nombre de Molins– a tener más diversidad de actividades.
Siglos después, el alcalde espera que la recuperación del palacio sea un impulso económico para una localidad que ahora tiene 25.868 habitantes. “Queremos atraer turismo cultural, desestacionalizado y de calidad. Todo aquel que quiera conocer el Renacimiento catalán deberá venir aquí. Queremos proyectarnos al país y a Europa”, ambiciona Paz.
La inversión, que asciende a 3,5 millones, cuenta con 960.000 euros de fondos europeos