La C-31 en el Empordà
Apoyo la carta de Carmina Vilaseca “El elogio de la lentitud” (11/X/2020). Es vergonzoso que en unos tiempos en que la salud de nuestro planeta corre un grave peligro, todavía existan entidades públicas que dediquen sus esfuerzos y nuestros impuestos a destrozar el territorio. El Departament de Territori i Sostenibilitat tiene prevista la prolongación de la C-31, desde Verges hasta un macropuente sobre el Ter en Torroella, lo que provocará una retícula con otras carreteras secundarias, fragmentará un paisaje armónico, perjudicará ecosistemas y cultivos... Y todo para solucionar la cola durante dos meses escasos en verano.
La belleza que todavía conserva milagrosamente el paisaje del Empordà es lo que atrae a tantos turistas buscando el relax y la calma, para olvidarse de las prisas y del estrés de sus ciudades.
¿Por qué no se invierte este capital en una eficiente red ferroviaria, que saliera del aeropuerto de Girona y diera la vuelta al Baix Empordà? Este sí que sería un proyecto sostenible.
Lola Arpa Vilallonga
Peratallada