Ridículo histórico blanco
El Alcoyano elimina al Real Madrid en la prórroga con un jugador menos
El refrán de más moral que el Alcoyano se hizo realidad en El Collao, donde el Madrid sufrió un ridículo histórico al ser eliminado de la Copa por los locales, que remontaron a los blancos en la prórroga con un jugador menos. La derrota supone un palo durísimo para el Madrid y en particular para Zidane, que de pronto se ve abocado a otra crisis de caballo quizás mas dura que la que estuvo a punto de costarle el puesto en diciembre. También pone en cuestión a muchos de los jugadores de la plantilla así como a su confección, cuyo único fichaje este verano, Martin Odegaard, está a punto de dejar el club por falta de oportunidades.
Nada le funcionó al Madrid. La defensa, con la baja de Nacho de última hora por haber estado en contacto cercano con un positivo de coronavirus, resultó totalmente inédita. Lunin debutó en la portería en partido oficial y estuvo fatal. Odriozola no jugaba desde la primera jornada; Militão no lo hacía desde finales de octubre; Chust, el segundo central, era otro debutante, uno de los dos jugadores del Castilla en la convocatoria y cerraba la zaga Marcelo, que ya se sabe que cuando juega esta temporada gafa al equipo.
De la línea de medios el único del que no se atrevió a prescindir Zidane fue Casemiro, con Valverde e Isco de acompañantes, los dos en horas bajas. Arriba Mariano tenía por fin su oportunidad, acompañado por el incombustible pretoriano de Zidane Lucas Vázquez y un Vinícius últimamente muy perdido, incapaz de un remate.
Ante este elenco de suplentes, el Alcoyano fue exactamente lo que se esperaba, un equipo aguerrido que esperó al Madrid en su medio campo y no le concedió un metro. Le tapó por todas partes, en ocasiones con dureza, y la mayoría de las veces por amontonamiento de efectivos.
El Madrid se entregó a las botas de Isco para crear, pero el malagueño no está ahora para casi nada. Retrasó el juego una y otra vez y los blancos solo encontraron algo de peligro cuando Marcelo entró por su banda, como en los viejos tiempos. Durante todo el primer tiempo el Madrid sobó el balón en horizontal, empeñado en entrar siempre en paredes por el centro.
En el Alcoyano su portero José Juan, de 41 años y un parecido notable con Luis Rubiales, se convirtió en el héroe indiscutible. Cuando ya todos veían seguro el 0-0 al descanso, el Madrid encontró su gol en el último instante. Marcelo puso un centro en el área en el 44 y la defensa local no advirtió que Militão cabeceó a la red el 0-1.
La segunda parte empezó igual, sin que el Alcoyano estirara líneas, confiado en que si aguantaba el arreón el partido le daría alguna oportunidad para empatar. Al cuarto de hora los locales introdujeron tres cambios para refrescar el equipo pero el Madrid siguió teniendo el balón, aunque el Alcoyano se atrevía ya a pasar del medio campo.
El plan del Alcoyano le salió bien. En el 81 botó un córner, Lunin salió mal, nadie acertó a despejar y Solbes empató en el segundo palo. De ahí al final el Madrid lo intentó sin suerte. José Juan le hizo una gran parada a Lucas Vázquez y el árbitro le negó un claro penalti por derribo a Militão.
Ya en la prórroga, la sorpresa. El Madrid siguió ofuscado. Entraron titulares como Kroos y Asensio y no le sirvió de nada. Cuando el Alcoyano se había quedado con uno menos y esperaba los penaltis encontró el 2-1 en una contra de Juanan.
El Madrid se adelantó con un gol de Militão pero el Alcoyano empató en el 81 y sentenció en el 114
Los suplentes de Zidane jugaron un partido pésimo y los titulares no pudieron acudir al rescate