Proyecto de parque eólico marino en la Costa Brava
La propuesta, que busca el consenso del territorio, prevé 70 molinos situados a una distancia de entre 10 y 22 km del golfo de Roses
Un proyecto con luces y sombras. Así es como ven pescadores, ayuntamientos o entidades ecologistas del Alt Empordà la propuesta de parque eólico marino flotante que dos empresas estudian situar a una distancia de entre 10 y 22 km del golfo de Roses. Luces porque el parque, que entraría en funcionamiento en una primera fase en el 2026, cubriría hasta el 90% de la demanda energética de la provincia de Girona y evitaría la emisión de hasta 42 millones de toneladas de C02 a lo largo de sus 30 años de vida útil. Y sombras por el impacto que podría tener sobre mamíferos marinos, las aves migratorias y el sector pesquero, especialmente sobre la flota de arrastre.
Los promotores, la empresa Blue Float Energy y el grupo de ingeniería Sener, proyectan el parque en una zona de veda para no interferir en la pesca. Sin embargo, el presidente de la cofradía de Roses, Antoni Abad, avisa: “Hace nueve años que decidimos dejar de pescar en 60km2 parafavorecerelcrecimiento de la merluza, pero eso no significa que en un futuro no levantemos la veda si la especie se recupera”. El parque eólico contaría con unos 70 molinos de 250 metros de altura y abarcaría una extensión de 160 km2,
El portavoz de la entidad naturalista Iaden, Raúl Domínguez, explica que el parque podría tirar adelante si fuera “el único” que se realizara en Girona, pero recuerda que hay otras propuestas en el Alt Empordà. El alcalde de Sant Pere Pescador y responsable de Cambio Climático del Consell Comarcal de l’alt Empordà, Agustí Badosa, pide a la Generalitat un mapa en el que se defina cuánta energía renovable debe producir cada comarca. La alcaldesa de Roses, Montse Mindan, reconoce que sin “consenso” el proyecto no podrá tirar adelante.