Citaciones como pizzas
Polémica con el reparto de notificaciones para las mesas electorales
Con estupefacción reaccionó el vecino de Santa Coloma de Gramenet Sergio Baladón cuando recibió la citación para formar parte de una mesa electoral el 14-F de manos de un repartidor que portaba una mochila de Glovo, como si de una pizza se tratara. Además, según ha denunciado, el sobre le fue entregado abierto.
El vecino denunció que el repartidor, además, no hablaba castellano ni inglés, lo que le impulsó a negarse a facilitarle sus datos personales y el DNI, al no considerar que se tratara ni de un funcionario público ni de un trabajador de Correos.
Baladón, que dice a conocer otros casos similares al suyo, presentó una demanda en el juzgado –siguiendo las indicaciones del servicio de emergencias 112, al que se dirigió en primera instancia– y acudió a la comisaría de la Guardia Urbana de Santa Coloma. En la denuncia, pide al juez que “se paralice el trámite electoral hasta que se depuren responsabilidades”.
Lejos de dirimir culpabilidades, el Ayuntamiento ha reaccionado airadamente contra el vecino, a quien dice conocer sobradamente por “sus denuncias sobre el trabajo de los profesionales”, a los que acusa de mala praxis y en ocasiones “ha llegado a agredir físicamente”.
Relatan desde el Consistorio que el ciudadano Baladón Badajoz compareció el martes en las dependencias municipales para quejarse de presuntas irregularidades en el sistema y de la forma de notificación de su nombramiento como miembro de una mesa electoral. Aseguran también que conocieron a través de los medios de comunicación que el vecino dijo presentar denuncia en el juzgado por este tema.
El Ayuntamiento colomense asegura que ha solicitado una explicación a la empresa concesionaria de las notificaciones electorales, MRW, y al servicio municipal responsable de las elecciones, que les aclararon que la utilización de la mochila de Glovo era porque el empleado había trabajado allí con anterioridad y la utilizaba porque tenía mayor capacidad para el reparto de notificaciones. Asimismo, garantizan que el notificador es un ciudadano español que habla perfectamente el castellano.
Por su parte, el secretario de la corporación garantiza la legalidad del proceso electoral en la ciudad y certifica que el fin de semana se repartieron 1.200 notificaciones de nombramientos de miembros de mesas electorales, 99 de las cuales las realizó el mismo repartidor.
Ante la polémica y todo lo acaecido, el Ayuntamiento de Santa Coloma de Gramenet no descarta emprender acciones legales contra el vecino Baladón.