Badalona y Sant Adrià de Besòs derriban el muro de las tres chimeneas
Badalona y Sant Adrià de Besòs anunciaron el acuerdo al que han llegado con las empresas Endesa y Metrovacesa, propietarias del solar de las tres chimeneas, para demoler el muro de la calle Eduard Maristany, que une los dos municipios pero que desde hace más de 50 años se encuentra en estado de degradación.
La calle es en la actualidad una de las más transitadas por paseantes y deportistas, pero también es una muestra de falta de conectividad y modernidad. El vial tiene ahora seis metros y con el derribo del muro llegará a disponer de 20 metros de ancho, que lo convertirán en un espacio dignificado, largamente reivindicado por los vecinos del barrio de la Mora y el frente litoral.
El actual muro que separa los terrenos de la antigua central térmica provoca un estrechamiento que comprime el paso de vehículos y peatones. Las obras tendrán un coste de 800.000 de los que el Ayuntamiento de Badalona asumirá el 90%. La ampliación, según el alcalde badalonés, Xavier García Albiol, será un momento histórico para la ciudad, que contribuirá a la dignificación de una zona degradada con “nueva iluminación, asfaltado, aceras, arbolado y un carril bici” pendiente del proyecto definitivo de desarrollo del plan director de las tres chimeneas.
En los mismos términos se expresó su homólogo de Sant Adrià de Besòs, Joan Callau, que destacó la creación de una nueva vialidad que permitirá dar continuidad al carril bici entre las dos ciudades, que a su vez conectará con la Diagonal de Barcelona. “Un paso importante para mejorar la calidad de vida de los vecinos”, concluyó el alcalde.
Para el director de la unión temporal de empresas (UTE) que integran Endesa y Metrovacesa, Miguel Díaz, colaborar en mejorar la accesibilidad y el entorno concuerda con el compromiso de las dos compañías con el territorio. En este caso, cederán un total de 1.900 metros para permitir la ampliación de la calle Maristany.