Fiel de Qanon, violenta y negacionista de tiroteos
Desde este año, los seguidores de los bulos conspirativos de Qanon tienen a uno de los suyos en el Capitolio, la congresista republicana Marjorie Taylor Greene. Su afición por la infundada teoría que sostiene que los demócratas están detrás de una red de abusos a menores y rituales satánicos era conocida antes de las elecciones y no fue un obstáculo para su victoria o para que Donald Trump le prestara su apoyo. En los últimos días han trascendido nuevos elementos del pasado de Greene que han llevado a los demócratas a exigir al Partido Republicano que se distancie de ella. En el 2019, la ahora congresista dio un me gusta a un comentario sobre la “ejecución” de la demócrata Nancy Pelosi que decía que “un tiro en la cabeza” sería lo más rápido para acabar con ella. En un vídeo difundido ayer, se ve a Greene hostigando a uno de los supervivientes de la matanza escolar de Parkland, David Hogg, uno de los líderes del movimiento. Decía que era un actor y, en la línea de las teorías conspirativas de Qanon sobre la mano negra del Estado que según ellos controla todo, que el suceso no era más que un montaje para hacer quedar mal al movimiento pro armas, al que pertenece. Pelosi, presidenta de la Cámara, calificó ayer de “devastador” que los republicanos la hayan asignado a la comisión de Educación del Congreso.