Un avión alemán con personal sanitario llega en socorro de Portugal
Un avión militar alemán, cargado con personal sanitario, ventiladores y camas, aterrizó ayer en Portugal, cuyo sistema de salud pública está al borde del colapso después de un fuerte repunte de la pandemia en enero, que lo ha convertido en el país del mundo con más nuevos contagios y muertos relativos a su población.
El equipo alemán, compuesto por 8 médicos y 18 enfermeros especializados en cuidados intensivos, gestionará una nueva unidad de ocho camas de uci en el hospital da Luz de Lisboa, un centro privado. La unidad en cuestión ya estaba equipada pero no había podido abrirse por falta de personal, dijo la ministra de Sanidad, Marta Temido, en la base militar donde aterrizó el avión de la Luftwaffe.
“Ocho camas pueden parecer pocas, pero es mucho para un sistema sanitario bajo tanta presión y donde los días venideros serán críticos –dijo la ministra–. La ayuda que Alemania nos proporciona es de una gran utilidad para un sistema sanitario con nuestros desafíos: profesionales sanitarios altamente especializados”.
Casi 7.000 pacientes están actualmente hospitalizados por covid en Portugal, de los cuales casi 900 en la uci, donde las camas estaban a un 94% de su capacidad a principios de semana. Aunque el número de nuevos casos detectados ha disminuido en los últimos días, el país todavía tiene por delante semanas en las que las hospitalizaciones seguirán creciendo, debido al tiempo que pasa entre el primer diagnóstico y las complicaciones que requieren atención médica.
El cargamento alemán incluye asimismo 50 respiradores, 150 bombas de extracción y 150 camas. “Es una señal vívida de la solidaridad europea y un símbolo de esperanza”, dijo el embajador alemán, Martin Ney, que explicó que el personal sanitario desplegado sería reemplazado por otro al cabo de tres semanas. “Es un esfuerzo a largo plazo”, subrayó. Alemania ya prestó ayuda a Italia, Francia y la República Checa cuando pasaron por lo peor de la pandemia.
Austria también se ha ofrecido para recibir entre 10 y 15 pacientes portugueses de cuidados intensivos en sus hospitales. El embajador austriaco en Lisboa, Robert Zischg, dijo que los ministros de Sanidad y Defensa de ambos países estaban en contacto y que estaba en manos de Portugal aceptar la oferta.
Portugal está confinado, con la frontera terrestre blindada y todos los centros educativos cerrados, debido a la fuerte expansión del virus desde finales de diciembre, y Lisboa es la zona más crítica del país. ●