Jxcat agita la sombra de un tripartito de Esquerra y PSC
Borràs señala los “modelos” de acuerdo de la Moncloa y Barcelona
Todas las encuestas marcan una carrera a tres hasta el trono del 14-F y Junts per Catalunya trató ayer por todos los medios de anudar a sus dos competidores, ERC y el PSC, para marcar distancias. Para ello, echó mano de la amenaza de un tripartito y sacó a relucir la lista de acuerdos, directos o indirectos, entre republicanos y socialistas desde uno de los epicentros municipales del agravio denunciado: Sant Cugat del Vallès, donde una entente entre ERC y el PSC –además de la CUP– rompió con 30 años de gobierno municipal convergente pese al triunfo de Jxcat en los comicios locales.
“Si suman, lo volverán a hacer”, avisó su presidenciable, Laura Borràs, que señaló los “otros modelos de tripartito” que a su juicio han tejido socialistas y republicanos en el Ayuntamiento de Barcelona y la Moncloa. “En el Gobierno español consiste en investir a Pedro Sánchez a cambio de un diálogo que no ha existido, de unos presupuestos que prometen una lluvia de millones que luego es la sequía más absoluta, y de dar apoyo a estados de alarma recentralizadores”, siguió, para reprocharle a Esquerra que “no se puede ser socio en Madrid y hacer ver que en Catalunya te peleas con su sucursal”.
Los republicanos suelen responder con el pacto de Jxcat y PSC en la Diputación de Barcelona, acuerdo que la aún portavoz en el Congreso dice estar dispuesta a revertir si ERC hace lo propio en los ayuntamientos. “A nosotros no nos preguntan si pactaremos con el PSOE del 155 porque no pactamos con ellos cada día”, disparó Borràs, arropada por tres consellers santcugatenses, Damià Calvet, Jordi Puigneró y Àngels Ponsa.
Por la tarde, Junts también usó su localización como espejo argumental. En este caso Igualada, primer núcleo con confinamiento perimetral al principio de la primera ola de la covid. “La pandemia nos ha mostrado las limitaciones de una autonomía y hace evidente que la independencia no es un capricho, sino una necesidad”, recalcó Borràs. La presidenciable de Jxcat, además, alabó la “perseverancia y resistencia” que demostraron, entonces, los igualadinos, y llamó a copiar el ejemplo para el proceso soberanista. “Nosotros ni reculamos ni nos resignamos, somos los que no cedemos”, proclamó, invitando al resto de fuerzas independentistas a que se mojen para seguir avanzando. Hasta entonces, aseguran, serán el “rival a batir” porque son los que “más incomodan al Estado” mientras otros “invitan a la resignación o a esperar un mejor momento”.
El partido de Puigdemont se define como el “rival a batir” porque es quien “más incomoda al Estado”