El nuevo impulso a la vacunación llega con la bajada de la tercera ola
Catalunya administrará esta semana las primeras dosis de Astrazeneca a policías y farmacéuticos
Tras más de dos semanas en que la vacunación contra la covid se había prácticamente estancado en las segundas dosis, Catalunya podrá ampliar en 57.000 personas el número de vacunados, una inyección de esperanza, a la que se suma la consolidación de la bajada de la tercera ola, aunque las ucis siguen muy llenas.
Esta semana se tienen 112..010 dosis de vacuna, al sumarse a las llegadas de Pfizer (64.530), 15.700 de Moderna y las primeras 31.780 de Astrazeneca, que ayer se empezaron a distribuir por España. Esta relativa abundancia si se compara a semanas de limitación, permitirá inyectar en Catalunya 15.000 primeras dosis de Pfizer, 11.000 de Moderna y todas las de Astrazeneca, explicó ayer la consellera de Salut Alba Vergés. Se pondrán casi todas las dosis, se reservarán pocas, de Moderna, que recortará unas semanas los envíos en un 20% (esta semana debían llegar 21.000 dosis). Las inyecciones de Astrazeneca se empezarán a poner hoy a personal de las farmacias y profesionales de la salud como fisioterapeutas, nutricionistas, logopedas y podólogos, entre otros; a funcionarios de prisiones y a los cuerpos policiales, de bomberos y emergencias, detalló Vergés.
Para estos últimos colectivos se enviarán las vacunas a sus centros y a los profesionales de la salud, la conselleria les enviará SMS con el día, hora y lugar donde inyectarse. Sea en el CAP o en 37 espacios repartidos por toda Catalunya, como los que se habilitaron para la campaña gripal y que seguramente ya quedarán como centros de vacunación contra la covid los próximos meses.
Vergés indicó que Astrazeneca ha programado envíos de 36.000, 91.000 y 131.000 dosis las próximas semanas, lo que impulsará la vacunación, pues las segundas dosis no se deben poner hasta 10 o 12 semanas después de las primeras. El hándicap es que en España se ha decidido no poner esta vacuna a mayores de 55 años, ante la falta de datos de su eficacia. Eso obligará, por ejemplo, a poner otra de las vacunas a algunos farmacéuticos o policías de más edad.
En cambio, Vergés dijo que “no repercute” en Catalunya que Sudáfrica haya apuntado que la vacuna de Astrazeneca no inmuniza ante la variante sudafricana del virus, pues aquí solo se ha detectado un caso. La consellera afirmó que tener tres vacunas abre una nueva etapa.
También se abrirá en las residencias, donde la vacunación ya reduce los casos de covid. Salut trabaja en las pautas para que los residentes recuperen actividades y los centros se abran más a las visitas, aunque Vergés dijo que se hará con cautela.
La misma que Salut mantiene ante la aún elevada presión asistencial y la variante británica del virus, que ya causa el 17% de los casos. Pero, por ahora, sigue la “bajada sostenida” de contagios: hay 2.200 diarios de media, informó Marc Ramentol, secretario general de Salut. Es la mitad de los que había a mediados de enero. Ramentol subrayó que en la última semana han bajado un 3% las urgencias por covid en primaria y hospitales; que la incidencia ya es inferior a 500 casos por 100.000 habitantes (484 ayer) y que la tasa de reproducción parece estabilizarse por debajo de 0,9 (0,86, ayer). Había 2.635 hospitalizados y un pequeño repunte de ingresos por covid en las ucis, con 694 pacientes. La consellera aseguró que se mantiene un “potente” estudio y seguimiento de casos con más de 700 personas dedicadas. Aparte, esta semana se harán test de antígenos a unos 60.000 integrantes de las mesas electorales.
Ramentol defendió que se han cumplido los escenarios que Salut calculó cuando el 15 de enero se propuso retrasar las elecciones de este 14-F. Según esas estimaciones, el pico de contagios se avanzó una semana y subió poco más del mejor de los escenarios (4.500/5.000 al día) y el de las ucis lo superó, sin llegar al peor caso (se preveían entre 670 y 770 críticos por covid y se llegó a 731). Si se mantienen las tendencias, para este domingo de votaciones, cabe esperar menos conta
gios de los temidos (eran al menos 3.000), pero los pacientes en las ucis superarán seguramente la estimación más baja (era de 620).
Por su parte, el Ministerio de Sanidad apoya la decisión de Catalunya de vacunar a policías y bomberos con las dosis de Astrazeneca, porque “no tiene sentido parar la estrategia de vacunación mientras llegan los fármacos o se deciden cuáles son los siguientes grupos”, indicó el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES), Fernando Simón, quien desmiente que esto suponga que cada autonomía vaya a “salirse” de la estrategia diseñada. “No pueden quedarse cruzados de brazos. No deben parar de vacunar”, señaló.
Simón reconoce que el hecho que la vacuna de Astrazeneca no se administre a mayores de 55 años obliga a reorganizar el plan elaborado por los técnicos, especialmente en relación con los mayores. El objetivo es vacunar a las personas de más de 80 años antes de finalizar marzo y es posible que se demore unas semanas. “Todo dependerá de cómo vayan llegando las vacunas”, señaló.
El epidemiólogo insistió en que la situación en España sigue siendo muy complicada con una incidencia media acumulada a 14 días de 667 casos por 100.000 habitantes, un dato, sin embargo, que revela una reducción importante respecto a hace dos semanas, en que había casi 900 casos por 100.0000 habitantes (en muchas zonas más).
“La situación mejora pero hay que dejar claro que está muy lejos de lo que se quiere conseguir. Hay que bajar y bajar mucho. A día de hoy, la presión en las ucis sigue siendo elevadísima con un 43% de ocupación de camas de media por pacientes covid y seis comunidades por encima del 50%”, explicó. Esto repercute en la mortalidad. Este fin de semana se registró un triste récord: 909 personas fallecidas por covid. Y la previsión es que esa cifra se mantenga unos días más hasta que se consiga reducir la presión en las ucis.
Simón no descartó una cuarta ola de la epidemia, aunque en el caso de que se produzca estima que será más leve y más lenta, entre otras cuestiones porque para entonces habrá muchos ciudadanos vacunados. El responsable del CCAES cree que esa cuarta ola también dependerá de si conseguimos bajar la incidencia de forma clara y tajante. Para ello, insistió, no se pueden relajar las medidas pese a que la situación mejore y menos para celebrar la Semana Santa.
TRAS LA VACUNA
Está casi a punto un protocolo para recuperar la actividad en las residencias
PREVISIÓN
Simón no descarta una cuarta ola, pero la prevé más leve porque habrá más vacunados