La sorpresa indígena
Yaku Pérez acaricia la segunda plaza con un discurso ecologista
El ecologismo y el movimiento indígena se han colado con fuerza en las elecciones de Ecuador. Yaku Pérez, candidato del movimiento Pachakutik, empata con el conservador Guillermo Lasso y acaricia las posibilidades de una segunda vuelta. Carlos Ranulfo Pérez (Cuenca, Ecuador, 1969) cambió en el 2017 su nombre en el registro por Yaku, “agua de monte” en lengua quichua. La defensa de este recurso natural y la lucha contra la minería vertebran gran parte de su discurso, profundamente anticorreísta. Pérez ha hecho de la Wiphala, la bandera arcoíris indígena, un símbolo de la campaña. Se presenta como un candidato poco convencional, que llega a los actos electorales en bicicleta y que financia su campaña con el micromecenazgo. Doctor en jurisprudencia y activista, participó en las protestas contra los proyectos mineros del expresidente Correa durante años y fue arrestado en varias ocasiones.
En el 2019 fue elegido prefecto de la provincia de Azuay, un puesto similar a gobernador. “Somos de la izquierda ecológica que defiende los derechos de las personas y que entiende a las comunidades indígenas”, afirmaba durante la campaña.
Su partido, el movimiento Pachakutik, se creó en 1995 para luchar contra las políticas neoliberas, rales y la globalización. En estas elecciones, han conseguido aunar parte del voto rural y a los ecologistas urbanos. Bajo el eslogan #Yakupower, el Pachakutic ha utilizado las redes sociales como Tiktok para llegar al electorado más joven, que ven en Yaku Pérez una alternativa a la izquierda de Arauz y su proyecto continuista. Su discurso feminista, a favor del aborto y panteísta indígena contrasta con Lasso y Arauz, que, pese a ser de ideologías opuestas, comparten valores profundamente católicos. Pese a su oposición a la explotación minera por parte de empresas extranjePérez aboga por un acercamiento a Estados Unidos en materia comercial y se muestra preocupado por las políticas de China en materia de derechos humanos. Pérez representa “otra izquierda más alineada con los valores ecologistas e indígenas y distanciada del socialismo clásico y del marxismo”, según afirmaba el periodista Iván Ulchurrota en America’s Quaterly. Aun así, el líder y activista ha prometido revisar los acuerdos con el FMI y condonar parte de la deuda, que supone el 60% del PIB ecuatoriano.
Si consigue pasar a la segunda vuelta, Yaku Pérez podría convertirse en el primer presidente indígena de Ecuador. Partiría con desventaja, ya que Arauz ha obtenido un 32% de los votos en la primera ronda. Sin embargo, las probabilidades de que el voto resentido con Correa y su candidato respalde de manera contundente a Pérez existen y podrían ser determinantes el 11 de abril.
Pachakutic ha centrado la campaña en la defensa del agua y la lucha contra las explotaciones mineras