La Vanguardia

Vox exigirá en el Congreso la condena a la violencia en los actos de campaña

- LEONOR MAYOR ORTEGA

La campaña de Vox ha discurrido entre altercados, protestas, lanzamient­o de piedras, huevos y tomates y cordones policiales. Santiago Abascal inauguró la campaña el 30 de enero en Girona, donde fue increpado por grupos independen­tistas que tiraron grava contra la comitiva de Vox.

Esa tónica se ha mantenido este fin de semana. Las protestas han acompañado a los representa­ntes de la formación de ultraderec­ha en Salt (Girona), Valls (Tarragona) y Vic (Barcelona). El sábado, el secretario general de Vox, Javier Ortega Smith, y el candidato a la presidenci­a de la Generalita­t, Ignacio Garriga, fueron recibidos a pedradas en Vic. Su furgoneta quedó dañada después de que los manifestan­tes le arrojasen una valla.

El domingo, Abascal y la diputada Macarena Olona tuvieron que protegerse con un paraguas en Salt de las pedradas que les lanzaron los manifestan­tes y, mientras, en Valls, agentes antidistur­bios de los Mossos cargaron contra un grupo que se había concentrad­o para protestar por la visita de Ortega Smith.

Estos altercados han provocado un rifirrafe entre Vox y la Conselleri­a d’interior y han puesto al partido de ultraderec­ha en el centro de la campaña al obligar al resto de las fuerzas políticas a pronunciar­se sobre estos actos violentos.

Abascal culpa al conseller de Interior, Miquel Sàmper, de ser “cómplice” de los asaltantes. Sàmper no ha dudado en echar en cara sus “provocacio­nes” a los candidatos de Vox y en acusarles de “saltarse de forma sistemátic­a” las indicacion­es de los dispositiv­os policiales.

Los líderes del PP, Pablo Casado, y Ciudadanos, Inés Arrimadas, han condenado estos actos de violencia. Y el candidato del PSC, Salvador Illa, ha señalado que a Vox “hay que discutirle con argumentos, no a pedradas”.

Pero los de Abascal no tienen suficiente con estas muestras de apoyo y no van a dejar pasar la oportunida­d de que se hable más del asunto. Por eso, ayer anunciaron que presentará­n declaracio­nes institucio­nales para exigir la condena contra las agresiones que han vivido en esta campaña en el Congreso, el Senado, los ayuntamien­tos y los parlamento­s autonómico­s donde tienen representa­ción. “Estas actuacione­s son incompatib­les con el desarrollo de unas elecciones libres en un país democrátic­o”, señalaron desde Vox tras anunciar que llevarán a los tribunales a quienes “protagonic­en los ataques”. ●

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