Casado se distancia de la gestión que hizo Rajoy del 1-O
El líder del PP cree que “podría haberse evitado” lo que pasó
Tres años después del referéndum, Pablo Casado se ha desmarcado de cómo lo gestionaron Mariano Rajoy y Soraya Sáenz de Santamaría. El ahora líder del PP ejercía entonces de portavoz del partido, pero no compareció ante los periodistas “porque no estaba de acuerdo con quienes decían que estaba votando en unas elecciones homologables, ni con quienes decían que no se estaba votando”, reconoció ayer durante una entrevista en RAC1. Casado añadió que “lo que estábamos viendo por televisión, en mi opinión debería haberse evitado”.
“Debería haberse actuado antes de aquella mañana”, dijo Casado, aunque se reafirmó en su rechazo al indulto de los presos independentistas. Luego, en un mitin en Tarragona, reclamó a Pedro Sánchez que acabe con la mesa de diálogo: “Que le diga a Iceta que no va a haber mesa de amnistía ni de autodeterminación, porque ni España es una dictadura, ni Catalunya una colonia” y pidió el cese de Iglesias
por afirmar que no hay plena normalidad política en España porque hay independentistas en la prisión y en el exilio.
La irrupción de Bárcenas en la campaña no amedrentó ayer a Casado, que exigió a los socialistas “que dejen de emponzoñar con asuntos en los que ni Alejandro ni yo tenemos nada que ver”. Fernández,
que jugaba en casa, reiteró que el PP no se moverá “ni un milímetro” de la Constitución y que en cambio, “el PSC quiere llevarse los votos constitucionalistas para dárselos a ERC” y situó a los independentistas y a Vox como las dos caras de la misma moneda, “por llamar traidores y cobardes “a quienes no piensan como ellos”.