Casado pide “que se sepa todo de una vez” y lamenta el circo del extesorero

“Un tesorero con donaciones que eran privadas sustrajo esos fondos y todavía no ha explicado por qué tiene 50 millones de euros en Suiza que no pudo ahorrar con su sueldo en Génova”, resumió ayer el presidente del PP en RAC 1 el caso del extesorero Luis Bárcenas. Pero si esos son los hechos que se han juzgado, las consecuencias políticas van mucho más allá de la responsabilidad “civil subsidiaria” del PP.

El actual presidente del partido es plenamente consciente de ello y, por eso, trata de abrir una brecha temporal que quisiera infranqueable entre el pasado y el presente: “Yo nací en el 81 y lo que quiero es que se sepa todo de una vez”, afirmó, para destacar que cuando se descubrió cómo había gestionado Bárcenas las cuentas del PP él era un joven diputado que lo llamó “chorizo”, razón por la cual el extesorero, con el que Casado asegura no haber hablado nunca, interpuso una querella que no tuvo recorrido. Por entonces, en el 2013, ya se había producido una “auténtica ruptura” de los populares “con este señor”.

“Lo que pido es que un delincuente que tiene derecho a mentir para defenderse no enturbie un partido que ha hecho mucho por España”, se defendió el líder del PP, que califica de “circo” el careo con Mariano Rajoy que pretende Bárcenas, que ha cambiado su versión “cinco veces en diez años” y ha perdido “veinte pleitos contra el PP”.

Con todo, si los jueces demuestran que “hay alguien más responsable”, Casado, que apeló a su “ejemplaridad”, aseguró que “no le temblará el pulso” para apartarlo, como ya ha hecho en las listas y en la ejecutiva con los imputados: “No voy a pasar ni una”.

“Hay una nueva generación en el PP”, dijo Casado, que fue elegida para pasar página de una etapa que él no va a “defender” y de cuyos usos y costumbres tiene conocimiento, según afirmó, por la prensa. “No estaba ahí”, destacó, y pidió para su partido “el mismo trato” que recibe el PSOE, que tiene a un miembro de su ejecutiva, Núria Marín, alcaldesa de l’hospitalet y presidenta del PSC, en el foco de un presunto caso de malversación de fondos públicos.

“Hay una asimetría”, lamentó el líder conservador, que también criticó a Pedro Sánchez por tener en su Gabinete a tres ministros que fueron consejeros de la Junta de Andalucía durante los gobiernos presididos por Manuel Chaves y José Antonio Griñán, condenados por el caso de los ERE.

Casado, por otra parte, se mostró sorprendido de que no se aplazara el juicio sobre los papeles de Bárcenas, porque se ha roto, a su juicio, la “regla no escrita” sobre no celebrar vistas orales de esta magnitud política durante campañas electorales, y ve en esta “casualidad” una estrategia para “debilitar” al PP.

En cuanto a los encuentros entre el abogado del PP, Jesús Santos, y Bárcenas, facilitados por Enrique López entre el 2017 y el 2019, cuando era magistrado en la Audiencia Nacional, Casado aseguró que esa circunstancia le “encaja” porque en aquella época el actual secretario de justicia del PP y consejero del ramo en la Comunidad de Madrid no estaba en política. “Parece que es algo habitual en los pleitos incluso del orden civil”, aseguró Casado, que subrayó que nunca hubo “ninguna negociación con Bárcenas”. ●

El presidente del PP afirma que él no va a defender una etapa de la que su generación quiere pasar página