Seis empresas piden 400 millones en préstamos al fondo de la SEPI
El ente público acelera en la gestión de las ayudas para firmas estratégicas
Tras Air Europa, la única que ha recibido hasta ahora una inyección de dinero público, y Celsa, Duro Felguera y Naviera Armas, entre otras, que están en una fase muy avanzada para obtenerlo, el Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas dotado con 10.000 millones y gestionado por la SEPI sigue acelerando en la tramitación de nuevas ayudas. Ayer, seis de las empresas que han solicitado préstamos para lidiar con las dificultades económicas derivadas de la pandemia y la crisis económica vieron cómo se iniciaba el estudio de sus peticiones, que en conjunto suman casi 400 millones de euros.
Los solicitantes son Hoteles Turísticos Unidos, que ha estimado sus necesidades potenciales en 198 millones; el grupo de aviación, turoperador y de agencias de viajes Wamos (75); la ingeniería Airtificial (30); el grupo hotelero, de distribución mayorista y catering Serhs (28); la cadena de gimnasios Holmes Place (26,5); y la acerera soriana Rugui Steel (25).
En todos los casos citados, las empresas han adjuntado a sus peticiones las preceptivas memorias económicas con los planes de negocio para los próximos años y sus previsiones de beneficio bruto de explotación (ebitda) que debe posibilitar la devolución de los préstamos. La SEPI espera ahora a que los asesores legales y financieros que están acreditados para ayudarle en el proceso de estudio y valoración de las solicitudes presenten sus ofertas, para lo que les ha dado de plazo hasta el próximo lunes. Una vez recibidas, adjudicará cada uno de los seis expedientes y empezará el trabajo que debe conducir a la concesión de las ayudas.
Tal como pide la SEPI, las seis empresas citadas han dividido casi a partes iguales sus peticiones totales entre créditos senior y préstamos participativos. Solo en dos casos, los de Serhs y Holmes Place, lo han hecho de forma diferente. La primera ha pedido 19,4 millones de deuda senior y 8,6 millones de préstamo convertible en capital, mientras que la segunda ha pedido 18,2 y 8,2 millones, respectivamente.
Los préstamos participativos tienen la enorme ventaja que se contabilizan como fondos propios, lo que ayuda a fortalecer la solvencia desde el momento en el que entra el dinero en la compañía. En cambio, solo se convertirán en capital, a partir del séptimo año, si la empresa no puede pagar. Los participativos son, además, una garantía para el resto de los acreedores financieros, que se sienten más tranquilos en cuanto la solvencia de las empresas es más elevada.
En paralelo al proceso de obtención de los fondos de la SEPI las empresas negocian –en al menos cuatro de los casos citados ya han comenzado– la refinanciación de la deuda con la banca. Es la forma de garantizar que el fondo público y el resto de los acreedores van alineados con el mismo objetivo y todos contribuyen a lograr una solución. Las empresas citadas sufrieron un desplome brutal de su cifra de negocio en el 2020. El ICO y los ERTE les ayudaron a gestionar la liquidez. Ahora, la SEPI puede dar un espaldarazo a su solvencia.
Hoteles Turísticos Unidos, Serhs, Wamos y el grupo de gimnasios Holmes Place, entre los nuevos solicitantes