Guindos pide seguridad jurídica para moderar los precios del alquiler
Los propietarios reclaman al Gobierno que evite regular “a base de ocurrencias”
“Seguridad jurídica”. Este fue el término que más se escuchó ayer en el encuentro digital El Sector Inmobiliario Tras la Covid-19, organizado por la Asociación de Propietarios de Vivienda en Alquiler (Asval) y Europa Press. El primero en esgrimirlo fue el vicepresidente del Banco Central Europeo y exministro de Economía, Luis de Guindos. “Los mercados con más oferta de alquiler y más moderación de precios son aquellos en los que el marco jurídico es más garantista. Es decir, la garantía jurídica es el elemento base para tener un mercado de alquiler con precios razonables”, aseguró.
No es lo que ocurre en este momento en España, según la percepción de Pablo Vera, consejero delegado de Testa, la socimi con un mayor volumen de pisos en alquiler en España. “Hay claramente una percepción de inseguridad jurídica. Cada día cuesta más explicar a los inversores lo que está por venir en España, porque en ningún país de Europa hay leyes que favorezcan o justifiquen la ocupación”, aseguró el directivo.
Para Luis de Guindos, conseguir esa contención de precios en el mercado del alquiler inmobiliario es clave por dos motivos. El primero, porque un parque de vivienda en alquiler asequible puede servir para abordar uno de los handicaps históricos del mercado laboral español, la escasa movilidad geográfica de sus trabajadores, fundamental en un contexto de altas tasas de desempleo como el actual.
Pero no solo se trata de evitar subidas de precios: una bajada brusca de los mismos tanto en alquiler como en propiedad también podría ser nefasta para la evolución de la economía. “Hay que intentar controlar los ajustes de precios y conseguir que estos sean moderados para evitar efectos de segunda ronda que impacten en la solvencia de los bancos y también de los fondos de inversión, que en los últimos años han incrementado considerablemente su exposición al mercado inmobiliario europeo”, alertó Guindos.
Por todo ello, el presidente de Asval y exalcalde de Barcelona, Joan
Clos, reclamó al Gobierno que evite regular “a base de ocurrencias” y que la nueva ley de vivienda evite medidas como la regulación de los precios del alquiler, “porque ya se ha comprobado que no funciona”. Tanto Clos como el profesor de Economía de la Universitat Pompeu Fabra José García Montalvo reclamaron que antes de aplicar cualquier política en base a lo que se ha hecho en otros lugares se evalúen los resultados obtenidos. “Hay que tomar nota de las experiencias que han dado buenos resultados, como las del País Vasco y Navarra, y aplicar las mejores prácticas”, aseguro Clos.
Sobre las medidas que deberían recogerse en la nueva ley, Eduard Mendiluce, consejero delegado de Aliseda Inmobiliaria y Anticipa Real Estate, sugirió que se contemplen incentivos fiscales para que los propietarios que alquilen por debajo de los precios de mercado puedan desgravarse toda la cuantía en el IRPF o no pagar IBI. Mendiluce también advirtió que “los próximos desahucios llegarán de impagos de alquiler”. Por ello, recordó la necesidad de poner en marcha la propuesta de Asval de un fondo de ayudas a las familias desfavorecidas, dotado con 750 millones de euros, para frenar situaciones extremas, que podría estar financiado con los fondos europeos.
CONSEJERO DELEGADO DE TESTA “En ningún otro país de Europa se justifica la ocupación de vivienda”, destaca Pablo Vera